Juanjo Ferrer, junto a Jaume Font y Cristina Ribas, ayer en la sede del PI en Sant Antoni tras la reunión mantenida por una docena de militantes. | Marcelo Sastre

La crisis en el gobierno tripartito de Sant Antoni se prolongará durante al menos el próximo mes, que es el plazo que el PI le ha dado al alcalde, Pep Tur Cires, para que restaure los decretos firmados por Juanjo Ferrer sobre la ordenanza de las terrazas y acepte «reescribir» el pacto de gobierno entre el PSOE, Reinicia Sant Antoni y el PI para la presente legislatura.

Ferrer anunció ayer que entrega su acta de regidor de Urbanismo y Actividades por Proposta per les Illes (PI) en el Ayuntamiento de Sant Antoni, tal y como adelantó PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA en su edición del domingo. Aseguró que abandona su puesto como segundo teniente de alcalde «por motivos personales y familiares», aunque no pudo ocultar que en su decisión ha tenido mucho que ver la anulación por parte de Pablo Valdés (Reinicia) de un decreto aprobado por Ferrer sobre la ordenanza para la ocupación de la vía pública cuando el regidor de Reinicia ejerció como alcalde accidental mientras ‘Cires' estaba de vacaciones.

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Ferrer anunció su decisión tras una reunión celebrada ayer en la sede de la formación regionalista a la que asistieron una docena de militantes y que se prolongó por espacio de dos horas.

El presidente regional, Jaume Font, que se desplazó a Ibiza para abordar este asunto, aseguró que la intención del PI «es mantener hasta el final los pactos firmados» y anunció que en las próximas semanas elegirán al sustituto de Ferrer, que podría ser el fisioterapeuta Paquito Fernández.

«Si el PI saliera del gobierno sería porque los otros compañeros del pacto no son lo suficientemente hábiles para firmar un pacto nuevo con una serie de cosas en las que estábamos de acuerdo al principio de la legislatura porque eran buenas para Sant Antoni. La moción de censura depende del alcalde y yo creo que no quiere; nosotros tampoco», manifestó Font, que expresó la intención del partido de «poder recomponer la situación en este plazo de un mes». Sin embargo, no descartó salir del gobierno municipal si no hay un entendimiento con sus socios y «no se respetan los acuerdos establecidos y el trabajo hecho por el PI en el municipio».