A primera hora de la mañana comenzaron a llegar los chavales que, distribuidos por grupos, se fueron caracterizando con ropas del campo, trajes típicos pageses, mariol·los, etc. Acto seguido comenzó el desfile de los alumnos para mostrar ante el jurado tanto la combinación de sus prendas como su estilo al caminar. Tiempo hubo después para la imagen en el photocall y para retomar fuerzas con el almuerzo.
A partir de aquí comenzó la gymkana que estuvo repleta de divertidas actividades y ejercicios. Dividida en dos partes, una de ellas al estilo de los programas televisivos de cocina, los alumnos enriquecieron platos como plátanos rellenos de chocolate, coca amb pebrera, coca pujada o solomillo de cerdo. La otra parte, era la de las actividades y ejercicios como lanzamiento de esponjas, carreras de sacos, jazz dance, pasapalabra o, de las más divertidas, boiling potatoes que consistía en tirar botellas ubicadas en el suelo con dos pelotas de tenis introducidas en unas medias pantys que se ponían los niños en la cabeza. También hubo momento para los juegos cooperativos, donde se integraron alumnos del aula UECO (Unidad Específica Educativa de Centro Ordinario) con otras capacidades. «De hecho, una de las alumnas de esta aula nos ha regalado el mejor uc de toda la jornada», aseguraba convencida la directora del IES Balàfia.
Por su parte, un grupo de alumnos se encargó de organizar una versión propia del programa televisivo Tu cara me suena, en la que se llevaron a cabo distintas actuaciones de canto y baile. También se realizó un Got talent.
La jornada finalizaba cerca de las 14.00 horas, momento en el que comenzaba una comida especial de los alumnos de Bachiller con sus profesores. Cerca de 70 personas para despedir a los chavales que en poco tiempo se dispondrán a realizar la prueba de acceso a la universidad. Y para despedirse, ¿qué mejor manjar que una tradicional paella?
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