Los sindicatos denuncian los problemas causados por el sistema informático y las deficiencias de los juzgados de Ibiza.

La caída del servidor central del sistema informático judicial en Ocaña (Toledo) paralizó la actividad en los juzgados de Ibiza, una anomalía que afectó a todos los juzgados de Balears.

En el caso de Ibiza, los problemas informáticos se vienen sucediendo desde la implantación de la justicia digital. Los problemas informáticos derivaron en una cadena de obstáculos. Funcionarios, jueces y fiscales tuvieron serios problemas para trabajar con normalidad durante la jornada de ayer.

Los funcionarios tuvieron que volver a utilizar el programa Word y las anotaciones a mano. El fallo genera unas demoras en cadena ya que, según las fuentes consultadas, todo el trabajo de ayer se tendrá que pasar posteriormente al programa Minerva.

El vicepresidente autonómico del sindicato CSIF, Juan Nieto, señaló que jornadas como las de ayer «son inadmisibles.

Es un desastre para los trabajadores del sector justicia y para los ciudadanos que tenían que cumplir cualquier trámite en los juzgados de Ibiza».

Nieto denunció los obstáculos que se están encontrando los trabajadores desde la implantación de la ‘Justicia digital'.

En días como el de ayer, que «desgraciadamente se repiten muchas veces, se perjudica el trabajo del juzgado de guardia y ni se pueden atender diligencias de carácter urgente», argumentó el responsable judicial.

En este sentido, Juan Nieto añadió que «lo peor es que la avería del sistema se puede prolongar durante varias jornadas».

«Nos consta que se ha dado conocimiento a la gerencia territorial del Ministerio de Justicia y al Centro de Atención al Usuario (CAU) y que están haciendo todo lo posible por solventar los problemas, pero esta situación no es de recibo. Es un desastre», apostilló, Nieto, quien denunció que estos problemas se suman a la gran cantidad de deficiencias que sufre el antiguo edificio de Isidor Macabich.

Desde mediados de noviembre, todos los tribunales de Balears funcionan con ‘papel cero'.

El sistema incluye un sistema de firma electrónica, muy criticado por sus usuarios. El nuevo programa también obliga a escanear un gran número de documentos y plantea dificultades a la hora de volcar atestados que aportan las fuerzas y cuerpos de seguridad.

LA NOTA

El programa ‘papel 0' está en entredicho

Los problemas, sin la intensidad del episodio de ayer, se han repetido desde la puesta en marcha del programa que tiene como objetivo suprimir el papel en la administración de Justicia.

La medida implica que todos los trámites, desde registrar una denuncia, tomar una declaración o revisar un expediente, se realizan en soporte informático a través de un programa denominado Minerva, que tiene varias aplicaciones.

El mantenimiento de los servidores depende del Ministerio de Justicia y está centralizado en Ocaña, (Toledo). El colapso de ayer se produjo después de un intento para mejorar la velocidad de respuesta tras una serie de días con mucho retardo.