Operarios de la Agencia Balear del Agua (Abaqua) se afanaban ayer en reparar la tubería subterránea de la desaladora de Vila que se rompió a última hora del martes a la entrada de Talamanca enfrente del Bar Flotante y que inundó los accesos y la zona de aparcamiento de la playa.

Según informaron desde la conselleria balear de Medi Ambient, los motivos de la avería fueron un fallo en la junta de una tubería de poliéster de 500 milímetros de diámetro. La tubería es de captación de agua del mar hacia la desaladora, por lo que, en esta ocasión, no ha existido peligro de contaminación para una playa castigada en la última década por los constantes vertidos del viejo emisario.

La avería, que no afectó el suministro de agua potable de los establecimientos turísticos de la bahía, espera ser resuelta a lo largo de los próximos días. Asimismo, desde el Govern señalaron que el suministro de agua potable para la ciudad «está garantizado», ya que la planta de Sant Antoni y la interconexión entre este municipio y Vila «funcionan correctamente y tienen sus depósitos llenos».

El presidente de la Asociación de Vecinos de Talamanca, José Colomar, restó importancia a esta avería porque «no hay peligro de contaminación» aunque admitió que la gente «desconfía a la hora de bañarse en la playa» pese a que los análisis de las conselleria de Sanitat aseguran que el agua es de buena calidad y, por lo tanto, apta para el baño.

Colomar destacó, por otro lado, la buena marcha de la temporada turística, con una ocupación «altísima» en hoteles y restaurantes de la zona.

LA NOTA

Los vecinos de Talamanca cifran en 400 los aparcamientos necesarios

Una vez despejado el futuro del emisario, cuyas obras empezaron la pasada semana y estarán acabadas antes de la próxima temporada, la principal reivindicación de vecinos y propietarios de bares y restaurantes es ahora la falta de aparcamiento.

Entre 350 y 400 es el número de plazas necesarias para atender a la fuerte demanda de aparcamiento, según aseguró el presidente de los vecinos. José Colomar lamentó que no se haya abierto este mes de julio como estaba previsto un solar que permanece vallado detrás del Hostal Talamanca y que permitiría habilitar alrededor de 180 plazas de estacionamiento.

Desde el Ayuntamiento de Eivissa aclararon que este solar no es de titularidad municipal, por lo que la decisión de utilizarlo como parquin corresponde a su propietario.

Por su parte, los propietarios de los diferentes bares y restaurantes de primera línea de Talamanca se quejaron no obstante de «los impedimentos que cada vez más pone el Consistorio» a causa de la instalación de pivotes para evitar que aparquen los vehículos.