En estos siniestros se han quemado un total de 59,13 hectáreas en todo el archipiélago balear, informó ayer la Conselleria de Medi Ambient, Agricultura i Pesca.
El departamento dirigido por el conseller Vicenç Vidal consideróque, hasta ahora, ha sido un año positivo si se tienen en cuenta las especiales condiciones meteorológicas extremas de la primavera y el verano, con una ola de calor de gran intensidad y duración y escasas precipitaciones que hacen prever una campaña «muy complicada».
Sin embargo, destacó «la rapidez y eficacia de los medios de extinción y el comportamiento responsable y el sentido común de los ciudadanos en materia de prevención han permitido unos buenos resultados en cuanto a la afección de incendios forestales».
Desde la Conselleria de Medi Ambient se lanzó un mensaje de «constante precaución y prudencia» que enlaza con toda la campaña de publicidad sobre la sensibilización dirigida a la ciudadanía de la autoprotección. De los 58 siniestros totales en Balears, 21 han ocurrido en Eivissa, uno en Menorca, uno en Formentera y 35 en Mallorca. El número de siniestros por estas fechas está en la media de los últimos diez años.
De los 58 incendios, el 11,7 por ciento han calcinado una superficie superior a una hectárea, mientras que el resto han sido conatos.
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