Vicent Torres calificó ayer de «bastante positivo» su primer año al frente del gobierno del Consell d'Eivissa, después de «acabar con la crispación» que, a su juicio, había generado el PP durante la pasada legislatura.

El líder socialista hizo balance de su primer año de mandato recordando la apuesta de su gabinete por «abordar los problemas sociales». «Hemos incrementado ayudas sociales y hemos aumentado los servicios para las personas, como la tarjeta para el transporte gratuito de nuestros mayores o recuperando la oficina de la vivienda», precisó.

También valoró como «muy satisfactorio» el pacto de gobierno con Podemos-Guanyem. «Hay diversas opiniones y la autocrítica es buena. Los acuerdos de gobierno se están cumpliendo y cualquier desavenencia no ha afectado para nada a los servicios de los ciudadanos, que es lo principal», dijo Torres.

En cuanto a los retos para el segundo año de legislatura, prioriza «tener en marcha proyectos de infraestructuras», como la reforma de la carretera de Santa Eulària o la Escola de Hostelería en sa Coma.

«También otros problemas que nos preocupan como la interconexión del agua, la puesta en marcha de la desaladora y la depuradora», agregó.