Para llevar a cabo estos trabajos, que se prolongarán hasta hoy, se ha optado por un sistema que consiste en una mezcla de vapor y polvo de silicio.
«Es la técnica menos agresiva y más adecuada para aplicar en las zonas afectadas», apuntó el Ayuntamiento.
Una vez que finalicen la limpieza, que se lleva a cabo en el baluarte de Santa Llúcia y el aparcamiento del Soto, los principales lugares que sufrieron este acto vandálico, se revisará el resultado para valorar la posibilidad de ampliar la limpieza en otras zonas que también han sufrido estos actos vandálicos.
La concejalía de Patrimonio también está trabajando en la sustitución de la actual cierre de los pasillos de las casamatas por un sistema de más altura para evitar el acceso al interior.
La empresa encargada de llevar a cabo la limpieza es Limpiezas Luis, con un presupuesto de 2.000 euros.
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