Los taxistas de Sant Antoni aseguran que no cabrán en la parada este verano dado que el municipio tiene muy poco núcleo urbano.

Los taxistas de Sant Antoni aseguran que es «totalmente falso» que haya habido diálogo con ellos por parte del Ayuntamiento y del Consell para negociar el plan de licencias estacionales para este verano y el que viene. Así lo han querido dejar claro a raíz de que las instituciones hayan salido públicamente diciendo que hay un contacto fluido con el sector. «Todavía estamos esperando a que nos llamen; hemos pedido cita con el alcalde José Tur Cires en tres ocasiones en los últimos 15 días y no nos han atendido. En la última reunión que tuvimos con el concejal José Antonio Ferragut nos dijo de muy malas maneras y en tono despectivo que así se iba a quedar y que ya nos veríamos en las alegaciones; no son maneras», explicaron desde la junta directiva de la Asociación de Empresarios Taxistas de la Bahía de Sant Antoni.

Falta de diálogo

Por la falta de diálogo y el carácter «arbitrario» del plan de estacionales, que en el caso de Sant Antoni implica 70 licencias temporales, los profesionales de este municipio prevén impugnar el proceso de concesión de licencias temporales, además de que se reservan el derecho de llevar el plan de estacionales a los tribunales por el hecho de que incumple «claramente» la Ley de Transporte. En este sentido, la normativa balear del sector de transporte establece en su artículo 52 que las licencias de carácter temporal se otorgarán «preferentemente» a los titulares de licencias ordinarias, es decir, a quienes tienen y mantienen un taxi durante todo el año. A esto hay que sumar que la ley no establece ningún cupo de reparto de las licencias temporales, lo que entra en contradicción con el 65% de licencias para titulares y el 35% para asalariados que establece el plan aprobado por ayuntamientos y Consell d’Eivissa. «Es decir, lo que establece la ley de forma clara y nítida es una preferencia y no ninguna prevalencia ni cuotas de reparto, siendo clara la interpretación de la adjudicación de dichas licencias temporales cuando hablamos de preferencia». Esto significa, en la práctica, «que las licencias temporales fijadas y establecidas como necesarias son adjudicadas preferentemente entre los titulares de licencia municipal de categoría A y cuando el listado de estos se haya agotado se comienza a adjudicar a los asalariados de categoría B». Un sistema que se ha roto con el nuevo marco para las licencias temporales acordado por ayuntamientos y Consell. Otro artículo de la ley que se incumple, concretamente el 53.3, es que se debe hacer un estudio de las necesidades reales de licencias estacionales en cada municipio, algo que en Sant Antoni no se cumple, así como tampoco se ha consensuado ni informado a los profesionales.

Los taxistas lamentan que el plan acordado perjudica «claramente» a quienes trabajan todo el año ya que al establecer un único turno de trabajo de cuatro meses y un porcentaje de reparto de licencias «los titulares quedamos en inferioridad de condiciones cuando somos quienes mantenemos el taxi todo el año, haya o no trabajo» y precisan que el coste anual por tener un taxi asciende a 40.000 euros. Esta desigualdad de condiciones se ve, además, en que los titulares tienen «dedicación exclusiva» mientras que los asalariados «compaginan el taxi con otros empleos», concluyeron.

LA NOTA

Una respuesta contundente

Los taxistas titulares de la localidad ‘portmanyina’ tienen claro que se sumarán al paro de servicio previsto para esta Semana Santa. «Viendo el trato que estamos recibiendo por parte de las administraciones, la respuesta del sector debe ser conjunta y contundente», concluyen.