El Ayuntamiento de Sant Josep ha denegado la solicitud una conocida marca de cerveza para organizar una fiesta privada en Platja d'en Bossa después de que Heineken se hubiera dirigido al Consistorio para solicitar permiso y celebrar este evento, que contemplaba la instalación de una zona privada en una superficie de 50x30 metros en la playa, un bar flotante en el mar, una zona de pitch football y un gran escenario sobre la arena.

Según explicaron ayer desde el Consistorio, el equipo de gobierno contestó a la empresa afirmando que «no es posible autorizar la fiesta ya que no se pueden celebrar eventos particulares de carácter promocional por parte de empresas privadas en las playas de Sant Josep».

Incluso afirmaron que el Ayuntamiento ya había rechazado previamente alguna iniciativa similar y así se lo ha hecho saber a los responsables de la empresa que quería hacer esta fiesta.

El equipo de gobierno considera que no se «puede pretender privatizar un espacio público como es una playa, aunque sea de forma temporal». También apuntaron que, «a pesar de entender que estas fiestas pueden tener cierto atractivo turístico, el Ayuntamiento considera que debe prevalecer el interés general y el derecho a disfrutar de las playas por parte de todo el mundo».

Desde el Consistorio recordaron, además, que estas fiestas pueden provocar también ruidos y suciedad, con una importante afectación sobre el medio ambiente, tal y como se ha visto en anteriores ocasiones.