El proyecto, presentado ayer en Madrid con la presencia del alcalde de Vila, Rafa Ruiz, ha sido realizado por los arquitectos Ramón Andrada, Ignacio Lliso y Julián Manzano-Monis, quienes disponen de siete meses para redactar el proyecto definitivo.
La propuesta seleccionada de las 16 que se presentaron incluye la construcción de un aparcamiento subterráneo a pie de muralla con muros que se formarán mediante una especie de rejas con piedra natural en su interior. La entrada al aparcamiento, que estará abierto tanto a turistas como a residentes, se hará a través de un pasillo abierto con vistas al mar que permitirá que entre luz natural en este espacio, donde se instalará la recepción del establecimiento.
Los usuarios del parquin, situado en la zona de es Soto, dispondrán de una conexión directa al Parador a través de un túnel excavado en la roca que conectará el interior con el exterior de las murallas y acabará con un ascensor que subirá directamente al futuro hotel. El aparcamiento no afectará a la muralla dado que se ubicará a una distancia de unos 15 metros del recinto amurallado.
El proyecto además respeta los restos arqueológicos que se encontraron hace cinco años y los museiza para abrirlos al público.
Según informaron desde el Ayuntamiento de Vila, una de las mejoras de este proyecto es la conexión entre la entrada del aparcamiento y el edificio del Parador que, en lugar de hacerse por el Pati d'Armes se hará en el edificio Poulet Sur. «El túnel de conexión es más corto y el Pati d'Armes no se verá afectado por la salida de este túnel», señalaron.
El alcalde de Vila se mostró satisfecho de este «pequeño pero importante paso» para la apertura del futuro parador. Según Ruiz, será «una obra complicada» pero confía en que los presupuestos generales del Estado del próximo año «incluyan una partida importante para que se haga realidad gobierne quien gobierne».
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