El proyecto inicial de construcción del parador se paralizó en el año 2011 tras descubrirse en el transcurso de las obras unos importantes restos arqueológicos. En concreto, unos restos de muros de época fenicia, la estructura de un templo romano y restos de casa de época púnica.
Tras cuatro años de espera, el proyecto vuelve a estar en marcha e incorpora la integración de los hallazgos arqueológicos además de una zona para aparcamiento.
Los encargados de seleccionar el proyecto de remodelación de esta antigua instalación militar del Castillo han sido los miembros de un jurado compuesto, entre otros, por representantes del Ayuntamiento de Vila, del Consell d'Eivissa y la Demarcación de Eivissa y Formentera del Colegio de Arquitectos de Balears.
Según informaron fuentes del Ayuntamiento de Vila, a partir de ahora se abrirá un nuevo plazo para que los ganadores de este concurso de ideas redacten el proyecto técnico definitivo y posteriormente se iniciará el proceso de adjudicación para llevar a cabo las reformas necesarias para convertir este conjunto histórico en el primer Parador de Turismo de las Balears.
El Castillo y la Almudaina fueron cedidos en 1972 al Ayuntamiento por parte del Ministerio del Ejército. Durante los años 70, estas instalaciones albergaron usos educativos hasta que el consistorio lo cedió al Estado con el compromiso de que albergara el futuro Parador Nacional.
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