Respecto al futuro de la residencia, Nuñez expresó su “preocupación e incertidumbre” ya que antes de 2018 dejará de ser hospital, “es una competencia impropia y mal dotada económicamente” en el antiguo hospital Can Misses. De hecho, se pregunta qué pasará “con los pacientes que lleva cuidando la institución desde hace más de 30 años”, y si “recibirán los mismos cuidados al dejar de ser hospital y quitar la atención médica de 24 horas”.
La consellera de Interior, Marta Díaz, se mostró sorprendida por los motivos de la protesta. “No pueden decir que no hemos negociado, me he reunido entre siete u ocho veces con UGT siempre con el tema de personal”. Recordó, además, que han hecho un incremento de plantilla, “que nunca se ha hecho, estamos apoyando plantillas y fomentando formación”. Recordó que los trabajadores “tienen media hora de cortesía; me he quedado alucinando, ahora resulta que no he negociado”. De hecho, aseguró que contactará con el secretario general de UGT para quejarse: “Que nos acusen a nosotros de no negociar me parece muy fuerte”. Asegura Díaz que los trabajadores ya tienen esa media hora, “quince minutos entran más tarde y salen quince minutos antes; no se les puede compensar y ahora resulta que no negociamos”. Respecto al futuro de la residencia, la consellera recordó que en 2018 la parte sanitaria se la quedará el Govern “y pasarán a formar parte de la plantilla del Govern”.
3 comentarios
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Para empezar, por favor, el nombre es hospital, no residencia. Desde luego, no esperaba de un gobierno progresista y de izquierda, que considere que en Ibiza sobra un hospital, ademas de las caracteristicas de este, y que en cambio inviertan un dineral en el hipodromo, en un hotel de asociaciones, aumento de personal en consejería de turismo o ITV por poner un ejemplo. Imagino que cuando ellos o un familiar suyo se rompan una cadera y precisen rehabilitación para seguir siendo independientes y regresar a su domicilio o bien tengan una enfermedad terminal que precise cuidados muy especificos y personalizados, y no tengan donde recibirlos , entonces se daran cuenta del error que han cometido
El tema radica que se quieren quitar la residencia como sea porque les cuesta mucho dinero y no saben como. Ya lo intento tarrés y estuvo casi a punto y ahora vuelven a la carga. Ellos ya no tendrán el gasto, pero Eivissa habrá perdido un servicio con muchos años y necesario de todas-todas. No tienen alma y debajo de ese discurso solo son apariencias .
Seguramente no se han leido el Decreto ley 2/2014, de 21 de noviembre, de medidas urgentes para la aplicación en las Illes Balears de la Ley 27/2013, de 27 de diciembre, de racionalización y sostenibilidad de la Administración local. Si se lo leen verán que no hay ninguna obligación de dejar de prestar el servicio