Este es el aspecto que presentaba el búnker cuando empezaron las obras de adecuación a finales de septiembre. Foto: DANIEL ESPINOSA

El acelerador lineal para la radioterapia del nuevo hospital Can Misses de Eivissa ya se encuentra en España. Un portavoz del grupo Juaneda-Miramar, empresa a la que se le adjudicó la puesta en marcha del servicio de radioterapia de Can Misses, aseguró ayer que el acelerador lineal se encuentra ahora en Valencia, en Aduanas, y está previsto que llegue a Eivissa entre el 11 y 14 de noviembre para su posterior instalación en el búnker. Aduanas de Valencia es uno de los puntos de entrada del territorio español de mercancías internacionales, como es el caso del acelerador lineal que se ha adquirido en Estados Unidos.

Desde la empresa concesionaria del servicio de radioterapia de Can Misses aseguraron ayer que «se están cumpliendo los plazos; todo el proceso que se marcó de las fechas va al día». El servicio de radioterapia tiene que estar listo para finales de diciembre de este año para recibir a los primeros pacientes en enero.

La instalación de la máquina se tendrá que realizar sin que interfiera lo menos posible a la actividad del hospital y en los pacientes del hospital. Una vez montado el acelerador lineal se empezarán a realizar las pruebas necesarias para comprobar que cumple con los requisitos que marca el Consejo de Seguridad Nuclear, ya que este organismo oficial es el que se encarga de supervisar las instalaciones radioactivas.

A finales del mes de septiembre empezaron los trabajos de acondicionamiento para la adecuación del búnker a cargo de la empresa Radytec Innovación, especialista en el blindaje de las instalaciones radiológicas. En febrero se adjudicó la instalación y gestión del servicio de radioterapia oncológica a la UTE formada por la Policlínica Miramar y Juaneda de Mallorca por un presupuesto de 13,6 millones de euros. En verano, la empresa adjudicataria cerró el contrato para la adquisición del acelerador lineal cuyo coste, incluida toda la maquinaria como los TACS, ronda entre los cuatro y cinco millones de euros.

En cuanto al personal, la empresa realizará nuevas contrataciones, aún sin concretar, y recibirá también el apoyo del personal de Oncología Miramar para llevar adelante el tratamiento de radioterapia de los pacientes de Eivissa y Formentera.

LA NOTA

Los trámites pasan por Seguridad Nuclear

El Consejo de Seguridad Nuclear recibió a principios de septiembre la solicitud de licencia para la instalación del acelerador de la radioterapia. Al tratarse de una instalación radioactiva, la tramitación de la licencia es uno de los requisitos imprescindibles para la instalación del acelerador lineal. Una vez instalado el acelerador lineal, la empresa concesionaria tiene que hacer una serie de calibraciones y esos resultados se enviarán al Consejo de Seguridad que tiene que realizar una inspección in situ para comprobar que todo funciona correctamente y en el caso de que así sea pueden empezar a tratar a los primeros pacientes.