Los sindicatos sanitarios CSI-F, USAE, CCOO, CEMSATSE y UGT organizaron ayer una asamblea informativa en Can Misses, donde anunciaron la convocatoria de una concentración para el día 14 de octubre a las 14.00 horas en el Hospital Can Misses y el Hospital de Formentera. «En Mallorca se habla de marea blanca y esperemos que en Eivissa también se hable de marea blanca porque nos afecta a todos», destacó el presidente de Sanidad del CSIF, Guillem Vila, que recordó que en las Pitiüses esta medida afecta a alrededor de 1.500 trabajadores.
Los sindicatos destacaron que la suspensión de este complemento «es una agresión del Govern a un derecho de los trabajadores de la sanidad pública», ya que «no se trata de un plus, sino de un derecho». «Pensábamos que se habían acabado los ‘decretazos'», destacó el representante de CEMSATSE, Carlos Rodríguez, que definió la esta decisión como ‘armengolazo'.
El secretario de Organización de CCOO en Balears, Manel García, lamentó que el Ejecutivo haya quebrantado la negociación colectiva y «se haya limitado a suspender este derecho sin negociar nada cuando es un derecho constitucional». La indignación también se debe, según detalló García, «porque han mentido al decir que no había dotación económica, ya que hemos demostrado con documentos que había una partida asignada», y por el «discurso peligroso» que están lanzando, «intentando enfrentar a la ciudadanía con los empleados sanitarios diciendo que somos unos insolidarios con el resto de la sociedad».
En este sentido, destacó que no entienden que la presidenta de Balears, Francina Armengol, defienda la decisión de no pagar esta carrera profesional porque se tienen que priorizar otras políticas como las sociales, cuando ella misma cobra 22.300 euros en dietas y han aumentado el número de asesores, consellers y directores insulares.
Los sindicatos explicaron que este derecho reconoce el «esfuerzo» que hacen profesionalmente para adecuarse a las nuevas tecnologías y progresar en su desarrollo profesional, aumentando su formación, y que se cobra dependiendo de la categoría profesional y del nivel alcanzado. «Oscila entre 20 euros los celadores y 90 euros los médicos, es decir, una miseria», especificó Guillem Vila.
Por otra parte, denunciaron que Balears «es la única comunidad autónoma» que no cobra la carrera profesional y que además, no todos los trabajadores del sector sanitario lo estaban percibiendo, lo que supone un «agravio» entre compañeros.
LA NOTA
Mañana, frente al Consolat
Los sindicatos de sanidad han establecido un calendario de asambleas informativas y concentraciones en los hospitales de las islas para protestar sobre la suspensión de la carrera profesional. Para mañana está prevista una concentración frente al Consolat de Mar, donde intentarán hablar con la presidenta del Govern balear, Francina Armengol.
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