El PP de Santa Eulària tachó ayer de “rabieta incoherente” el desplante del conseller de Medi Ambient, Miquel Vericad (Podemos), después de abandonar airadamente una reunión celebrada el jueves con el alcalde de Santa Eulària, el popular Vicent Marí, y los vecinos y afectados por los malos olores de la depuradora del municipio. Vericad salió de la reunión exclamando “esto es inadmisible” en alusión a los gritos y el tono de un encuentro que desde el PP califican de “reunión tensa, fruto de la situación que están viviendo los vecinos”.

“Dice el refrán que por sus obras los conoceréis, y es lo que estamos comenzando a hacer con los representantes de la mal llamada ‘nueva política' y el resultado está siendo muy preocupante. Día a día, los supuestos garantes de la libertad, el diálogo y la colaboración, nos sorprenden con nuevos detalles que confirman la escasa eficacia de su gestión. De otra forma, no se puede entender que un conseller, que representa a todos los ciudadanos se levante y deje plantados a unos vecinos y a su alcalde porque ‘no le gusta' cómo le hablan”, indica la formación en un comunicado.