No obstante, la semana arrancó con una potente declaración de la alcaldesa de Vila, Virginia Marí, quien admitió estar dispuesta a suspender licencias urbanísticas en caso de que la anulación del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU) suponga la desprotección medioambiental de alguna zona. También el lunes conocimos de la mano de este rotativo que los incendios han calcinado en Eivissa en lo que va de año 25.500 metros cuadrados tras la última deforestación por las llamas de una finca particular en Sant Llorenç.
La entrada de un grupo inversor en el CD Ibiza –el tercero en su historia reciente- fue otra de las noticias más destacadas en los albores del mes de marzo.
El martes salieron a la luz los datos de febrero del mercado laboral con un descenso del 12,4% en el número de desempleados en la isla respecto al mismo mes del año anterior. La contratación aumentó un 7,5% en Eivissa, aunque descendió ligeramente en Formentera.
Por otra parte, la densa niebla que cubrió la isla en los días centrales de la semana provocó numerosas incidencias en los transportes aéreo y marítimo, además de curiosas postales como Dalt Vila cubierta de brumas en un día aparentemente soleado. Además, el miércoles conocimos que Formentera contará con cuatro concejales más la próxima legislatura a consecuencia del aumento de su población.
Las diferencias entre los Ejecutivos de Formentera y del Govern balear se pusieron de manifiesto el miércoles en la feria de turismo de Berlín, donde Jaume Ferrer rehuyó fotografiarse con los populares y escenificó su malestar con el conceller de Turisme balear, Jaime Martínez, en cuanto a la promoción de la administración autonómica.
Además, el jueves asistimos a la imputación del alemán Matthias Kühn por las obras de su chalet en Tagomago. Fiscalía pide dos años de prisión para un empresario que ha desafiado las reglas medioambientales y de territorio de nuestra isla.
Las previsiones de turismo para la próxima temporada estival marcaron la agenda de nuestros gobernantes en la ITB alemana. Las altas expectativas de visitantes obligan a las compañías a adelantar vuelos y buscar nuevos enlaces para satisfacer la demanda de los touroperadores. La misión ahora es lograr un turismo sostenible para la isla y que sus habitantes, y no una pequeña minoría, se beneficien de la riqueza generada.
La semana acaba con varios apuntes en la agenda: el traslado definitivo de instrumental y personal al nuevo hospital de Can Misses, previsto para mañana, y la puesta de largo de las candidaturas de los (numerosos) partidos políticos que a partir del 24 de mayo tratarán de gestionar nuestras vidas.
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