El espíritu y toda la esencia de la cultura de los años hippies se adueñó completamente de las calles de Sant Antoni en la noche del pasado sábado, con motivo de la celebración de la XI Fiesta Flower, que se enmarca dentro de los actos organizados para las fiestas patronales de la localidad.
Miles de personas disfrutaron de una velada marcada por un intenso colorido, los variopintos disfraces de estilo retro y una banda sonora fundamentada esencialmente en grandes hits de las décadas de los 60, 70 y los 80, que logró calentar y mucho, el ambiente en el interior de una carpa repleta de jóvenes y no tan jóvenes, que no pararon de bailar, ansiosos como estaban por no desperdiciar un solo minuto de diversión.
La jornada Flower de San Antoni comenzaba a tomar temperatura durante la tarde, con el desarrollo de una Fiesta Infantil, amenizada por ‘Piruleto', en la que los más pequeños de la familia, pudieron también dar rienda suelta a toda su energía, bailando la música que cautivó hace años a sus mayores y participando en las distintas actividades organizadas, en una jornada cargada de sorpresas para todos ellos.
Ya al caer la noche, la horquilla de edad de los asistentes fue dando paso a un creciente número de grupos de jóvenes y no tan jóvenes ya, perfectamente ataviados para la ocasión. De este modo, comenzaron a verse pelucas de todo tipo, a lo afro, melenas lisas o de múltiples colores, que servían de complemento ideal a los abundantes y muy conseguidos disfraces de tendencia hippie que se lucieron por las calles de San Antoni. En este sentido, Silvia Simó, una joven vestida como si de una segunda Janis Joplin se tratase, y en nombre de su grupo de amigas nos aseguraba que «nos encanta esta Flower, es un tanto especial, es diferente a otras al estar abierta a todo el mundo, a gente de todas la edades. Llevábamos varias semanas esperándola, preparando nuestros disfraces con muchas ganas de poder venir…¡Y aquí estamos!».
Poco a poco las idas y venidas de grupos de participantes entre el West End y el Paseo de las Fuentes se hicieron una constante, hasta llenar el interior de la carpa de 1.500 metros y todos sus alrededores con una creciente agitación. Y no era para menos, ya que pasadas las once de la noche, el Dj Javi Box, iniciaba desde su privilegiada posición sobre el entarimado que ornamentaba un viejo C - 2 Caballos, un completo repertorio musical con el que enseguida se metió al público asistente en el bolsillo. Un heterogéneo público que en todo momento se sintió partícipe y protagonista de la fiesta, y que no dejó de jalear y de aplaudir cada uno de los ‘tracks' que desde la cabina les fueron proponiendo para agitar con sus ritmos la pista de baile.
Así las cosas, la velada para los amantes de la Flower se prolongó hasta bien entrada la madrugada, suponiendo un éxito para sus organizadores y convirtiéndose de nuevo en todo un referente para vecinos y visitantes, dentro de la oferta lúdica y turística, de la temporada invernal en San Antoni de Portmany.
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