Eivissa cuenta con siete torres de vigilancia repartidas por toda la línea de costa de la isla. En ellas descansan varios siglos de historia que nos invitan a navegar entre cuentos de piratas y corsarios. Algunas de las construcciones, situadas en lugares emblemáticos, soportan los daños que producen el paso del tiempo, la meteorología y los cientos de visitantes poco respetuosos que peregrinan hasta ellas cada año. En este sentido se plantean varios problemas, por un lado la imposibilidad de los dueños de las torres para mantenerlas en condiciones debido a la falta de seguridad. Por otro lado, la posibilidad de cerrarlas y terminar con los paseantes que sí que las respetan y disfrutan.
Torres amenazadas
También en Pitiusas
- Multazo de casi medio millón por tener un local con cafetería, centro de yoga y guardería
- «Vivimos un momento crítico»
- Denuncian un intento de okupación en una vivienda de Cap Martinet
- Eivissa Medieval 2024: «Más grande, más visual, más cultural» y con el objetivo de superar los 200.000 visitantes
- José Manuel Molina, nuevo director general de Nobu Hotel Ibiza Bay
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
I perquè no la tanquen?. Total, per dins no hi ha res a veure, és més bella per fora que per dins. Una altra opció és fer lo que s'ha fet amb sa d'Es Carregador o Sa Sal Rossa: obrir-la al públic però vigilada i dins un horari. No es poden deixar així abandonades com una merda. Pensem que Eivissa no és molt rica en monuments, idò conservem lo poc que tenim.