Los jueces decanos de toda España abordaron en Sevilla la concesión de los indultos por parte del Gobierno a personas condenadas por casos de corrupción sin mencionar de manera específica a Jaume Matas, aunque sí manifestaron su preocupación por una práctica que ya consideran «abusiva», según declaró ayer el juez decano de Palma, Francisco Martínez.

«Ante la gravedad de esas conductas (de corrupción), y ante la práctica abusiva de la solicitud del indulto con argumento y vía para suspender la condena, consideramos que esa suspensión se ha convertido en un hábito», resumió Martínez en una rueda de prensa celebrada ayer en su despacho de los Juzgados de Vía Alemania.

El juez decano de Palma matizó que en el encuentro nacional de jueces no se había hablado de no conceder indultos, aunque él, a título personal, cuestione «seriamente la procedencia de esa institución en pleno siglo XXI».

«Tiempos ya superados»

«Su origen, su regulación legal, es propia de unos tiempos ya superados y no tienen nada que ver con los esquemas actuales, ni sociológicos, ni democráticos ni constitucionales. Es una prerrogativa real que no tiene mucho sentido incluso de que exista, pero es una opinión personal», subrayó.

Martínez, asimismo, se refirió a las críticas formuladas por sus compañeros al actual sistema de elección de vocales del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

«Hay una gran preocupación entre los decanos por la injerencia del ámbito político dentro del núcleo duro de independencia del Poder Judicial. No tanto en cuanto a la reforma, que ya la cuestionábamos acatando evidentemente la ley, pero rechazábamos que todo se redujese a una cuestión de ‘cuotas politicas' donde se había precocinado absolutamente quienes iban a formar parte del órgano de control de los jueces», señaló.

El juez decano de Palma también explicó que sus compañeros se había referido a la creación de un cuerpo de expertos contables para que les asesoren en la lucha de corrupción, y puso como ejemplo a los peritos expertos en medicina legal.