Ordenanzas del Parlament piden a un activista que no exhiba pancartas | J. Morey

El pulso continúa y el Govern no dará su brazo a torcer. El Ejecutivo hizo ayer caso omiso a casi tres horas de criticas y protestas dentro y fuera del Parlament -que ayer reanudó su actividad con una crispada sesión donde la política educativa fue la protagonista- y a la segunda jornada de huelga del profesorado de las Islas, que tuvo un seguimiento algo menor al del día anterior, para dejar claro que el decreto sobre el Tratamiento Integral de Lenguas (TIL) no es negociable.

Tanto el president Bauzá como la consellera d'Educació, Joana María Camps, lo dejaron claro en sus intervenciones. Frases como «No retiraremos el TIL» o «no cedemos a presiones» marcaron una jornada crispada.

La ‘marea verde' reivindicativa se coló en la sesión plenaria. La mayoría del público, así como la práctica totalidad de los diputados y las diputadas del PSIB y Més acudieron a la Cámara con alguna prenda de color verde o alusiva al conflicto.