Bartomeu Barceló. | Joan Torres

El fiscal superior de Baleares, Bartomeu Barceló, ha subrayado en relación al duque de Palma, Iñaki Urdangarin, imputado en la causa que indaga las presuntas irregularidades cometidas a través del Instituto Nóos, que «no por su condición va a tener un beneficio» en el caso de que finalmente se considere probado que delinquió a través de esta entidad, sino que, más al contrario, «incluso puede perjudicarle».

En una entrevista concedida a Europa Press, Barceló, recientemente reelegido en su cargo por cinco años más, ha aseverado sobre el marido de la Infanta Cristina que «si este señor ha cometido delito se sentará en el banquillo, y si no, se archivará su causa» como en el caso de «cualquier otro ciudadano», tal y como ha puesto de manifiesto.

De hecho, el fiscal superior ha abogado por que en el marco de las investigaciones en torno a Urdangarin «rija el principio de igualdad ante la Ley», si bien ha preferido «no hacer futuribles» en torno al desenlace de la situación procesal del duque de Palma.

«No se puede decir lo que va a pasar, de ser así sería un afortunado», ha incidido Barceló respecto al yerno del Rey Don Juan Carlos, para quien la Fiscalía Anticorrupción y el sindicato Manos Limpias, personado como acusación popular en el marco del caso Nóos, han solicitado una fianza de responsabilidad civil de 8,2 millones de euros sobre la que el juez José Castro prevé resolver en próximas semanas.

ELUDE PRONUNCIARSE SOBRE LA INFANTA CRISTINA

Noticias relacionadas

Mientras tanto, Barceló se ha limitado a afirmar que «todo el mundo tiene derecho a opinar» al referirse a quienes consideran que la Infanta debería ser citada a declarar dentro de estas pesquisas, algo que ya solicitó Manos Limpias y que fue desestimado por la Audiencia Provincial de Baleares.

Y es que el sindicato, a través de un escrito que presentó para pedir la imputación de la Infanta, consideraba que la hija del Rey Juan Carlos fue «beneficiaria directa» del incremento patrimonial y de los ingresos obtenidos de forma supuestamente fraudulenta por el Duque de Palma.

La entidad, representada en este procedimiento judicial por la letrada Virginia López Negrete, desglosaba los indicios que, a su juicio, llevan a concluir que la esposa del encausado fue «actora directa -por encubrimiento, complicidad o cooperación necesaria- y por ende beneficiaria de las presuntas actividades delictivas de Urdangarin».

«CONOCEDORA, CUANTO MENOS, DE LAS ARGUCIAS FINANCIERAS FRAUDULENTAS»

El sindicato apuntaba además que la hija del Rey era «conocedora, cuanto menos, de las argucias financieras fraudulentas» que se habrían llevado a cabo para evadir impuestos a Hacienda, además de ostentar la titularidad del 50 por ciento del capital de la mercantil Aizoon, donde también desempeñaba el cargo de secretaria.

Manos Limpias recordaba finalmente que el nombre de la mujer de Urdangarin figuraba en las tarjetas de visita que éste mostraba «para facilitar el acceso, en condiciones de privilegio, junto con el nombre del secretario de las Infantas, el señor García Revenga, con su pleno conocimiento». Además, postulaba que la intermediación del asesor externo de la Casa Real, José Manuel Romero, para «paralizar y alertar de las actividades delictivas de Urdangarin eran igualmente conocidas por la Infanta».