Esto lo aprovecharon cerca de medio centenar de pequeños que no pararon de disfrutar de los juegos preparados directamente para ellos. «La intención es que toda la familia si quiere se ponga el bañador y disfrute con todas las actividades que hemos preparado y, viendo toda la gente que ha venido, se puede decir que la jornada ha sido todo un éxito», explicaba con cara de satisfacción Ana Costa, coordinadora de la actividad.
Se lo pasaron en grande
Además, observando la sonrisas que se dibujaban en los rostros de muchos de los niños participantes también se podía deducir que la idea estaba funcionando. Los gemelos Tomás y Diego de 4 años, eran junto a la pequeña Ely, los más activos en la zona del tobogán; Joan y Pere, no paraban de lanzarse desde un pequeño trampolín; Luis intentaba caminar lo más posible sobre una pasarela colocada en la piscina grande, y Claudia no paraba de colocar piezas en una peculiar construcción. Daba igual la edad y la actividad, lo importante era disfrutar y perder el miedo al agua.
Incluso, también hubo tiempo para que los niños de mayor edad que llegaron a la jornada de puertas abiertas mediada la mañana pudieran disfrutar con juegos relacionados con el waterpolo instalados en la piscina grande.
«Aunque entre los niños que han acudido hoy los hay de muchos niveles, desde los que están aprendiendo a nadar hasta aquellos que ya son todos unos expertos, eso hoy no importa en absoluto porque están acompañados de sus padres y porque el único objetivo es pasárselo lo mejor posible», explicaba la propia Ana Costa mientras controlaba que ninguno de los niños tuviera problemas a la hora de lanzarse por el tobogán.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.