Dos empresas locales de rent a car se unen para «plantar cara» a las grandes cadenas

Objetivos
Una de las principales metas que quieren conseguir con este acuerdo de colaboración es dar respuesta a los grandes flujos de trabajo que, al estar separadas y competir, no podían asumir: «Las dos empresas trabajando juntas tenemos una flota de 2.000 coches con la que estaremos más preparados para poder dar un mejor servicio cuando haya más trabajo. En este sentido, BK podrá disponer de los coches de Class, y a la inversa, cuando se necesite». Cárdenas asegura que esto «sienta precedente» en las Pitiüses, pues hasta el momento se había producido compras o fusiones empresariales en el sector, pero no se había firmado un acuerdo de colaboración.
Esta iniciativa pretende, además, intentar hacer frente a las grandes cadenas multinacionales en alquileres de coches: «Estamos viviendo un momento muy complicado. Lo que no podemos hacer es quedarnos parados sin hacer nada y pensar que, en momentos de crisis, continuar con lo que uno tiene es suficiente y a ver si pasa la marea. Este pensamiento es un error. Para estar bien hay que buscar la innovación y no quedarse parados».
Esta «alianza estratégica» prevé futuras acciones en el sector que aún están por determinar.

Otra forma de «política empresarial»

Cárdenas asegura que este acuerdo es una manera de hacer «política empresarial» diferente a la que plantean las grandes cadenas internacionales del sector instaladas en las Pitiüses: «La consecución de este acuerdo supone un antes y un después en el sector del rent a car local y pretende ser otra forma de hacer política empresarial frente a determinadas multinacionales instaladas en la Isla que bajan su estrategia en fijar precios súper bajos de enganche para luego cobrar una multitud de servicios adicionales».