Bernat Joan y Esperança Marí explicaron ayer los motivos por los que abandonaron la militancia de Esquerra Republicana, que tiene su raíz en desacuerdos con el partido en Mallorca y Catalunya. Bernat Joan relató que decidió dejar ERC tras 19 años en el partido (fue su fundador en Eivissa y lo dirigió en Balears) porque tras participar en el gobierno de la Generalitat como director general se dio cuenta de que «no ha madurado lo suficiente para ser un partido de gobierno». Joan hubiera preferido pactar con CiU por «afinidad ideológica» y no con Iniciativa y el PSC, pero aparte de eso, considera que el gobierno iba por un lado y el grupo parlamentario y el partido por otro.
Además, cree que ERC no aplica las mismas medidas en Girona o Lleida que en la Comunitat Valenciana o Balears, por lo que no es un «verdadero partido de Païssos Catalans». En este sentido, puso como ejemplo que la dirección de ERC sí ha intervenido en problemas que se han dado en Catalunya y no ha hecho lo mismo en Balears cuando se han producido conflictos similares.
Joan consideró también que en la etapa de Puigcercós se ha «dinamitado un potencial extraordinario» y se ha pasado de tener 8 diputados en el Congreso a 3 y 23 en el catalán a 10. «No ha habido autocrítica», añadió el exeurodiputado, que sí ve con buenos ojos a la dirección actual.

Esperança Marí
También su mujer, Esperança Marí, que es diputada en el Parlament por Pacte per Eivissa (ERC y Gent per Eivissa), explicó que decidió dejar el partido después de que la dirección de ERC en Balears decidiera dejar el pacto de izquierdas en la pasada legislatura. Ella desobedeció las órdenes del partido y siguió apoyando a Antich, con lo que se convirtió en «persona non grata». Aseguró que sufrió muchas presiones y una situación de «violencia» que tuvo un «elevado coste personal». Marí criticó que la dirección de ERC en Balears no trabaje por la unidad nacionalista y no tenga buena relación con el PSM, cuando ellos desde Eivissa siempre han trabajado unir esfuerzos con ENE. «Yo no quiero enfrentarme a ENE», insistió Marí.
Joan cree que el partido ha perdido la oportunidad de incluir sectores más amplios, como a los progresistas liberales como él, con lo que seguirá siendo una formación «residual».
En su momento, quisieron crear una federación propia de Eivissa y Formentera, algo que se bloqueó desde Palma. Por eso finalmente se han ido del partido, aunque estas últimas elecciones han colaborado activamente. Tampoco han convencido a más gente de ERC para que lo abandone porque la cuestión de la militancia «es muy personal».

No han hablado de entrar en Gent x Eivissa
Pese a que Gent x Eivissa se creó en las mismas épocas en las que Joan y Marí se dieron de baja, aseguran que no han hablado de integrarse en esta fuerza. Marí recordó que está comprometida para estar en Pacte per Eivissa durante tres años.
También lamentaron que en estas pasadas elecciones PSM-ENE y ERC no hayan concurrido juntos porque ERC de Mallorca ha creado «una herida demasiado grande». Eso sí, aseguran que su relación con sus compañeros de ERC de Eivissa es «muy buena».