Minutos después de que la modelo Robin Van der Meer diera el 'sí quiero' a su flamante marido, el también modelo Mark Vanderloo, en una carpa ilegal instalada en el islote de s'Espalmador aparecía una patrulla del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil para levantar acta del evento que en esos momentos reunía a medio centenar de personas.
Los organizadores de la ceremonia aseguraron a los agentes de la Benemérita que allí se estaba rodando un anuncio y que tenían el permiso del Consell de Formentera (administración que no tiene competencias en el islote), según informó la Comandancia de la Guardia Civil de Balears.
La directora del Parc Natural de ses Salines, Paula Goberna, que se encontraba ayer en Formentera, había dado aviso al mediodía a los agentes para que averiguaran qué estaba ocurriendo en el islote protegido de s'Espalmador.
Allí, desde primera hora de la mañana se habían instalado una decena de sombrillas y más de medio centenar de sillas para acoger a los novios e invitados de la boda del famoso modelo con la madre de sus hijos. Vanderloo apareció alrededor de las doce en un velero con cerca de 40 invitados, mientras que su mujer lo hacía minutos más tarde en una lancha rápida. Tras la ceremonia, los novios desaparecieron del lugar en un llaüt.
El modelo Mark Vanderloo se salta todos los permisos para casarse en s'Espalmador
Los organizadores aseguran a la Guardia Civil que rodaban un anuncio y tenían permiso del Consell. Ni el Parque Naturale ni Costas autorizaron la ceremonia celebrada ayer en la playa
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