Pere Terrassa, que ayer fue elegido director general de IB3 sin ningún voto en contra (el PP optó, finalmente, por la abstención: 27 votos en blanco frente los 28 de los partidos del Govern y UM), anunció el fin de las «cuotas de partido» en el ente público y avanzó que, en los próximos días, promoverá una serie de cambios en el núcleo de dirección. Terrassa, economista sin reconocido perfil político, dejó claro en sus primeras declaraciones tras su elección, que 'caerán' los dos directores adjuntos nombrados a propuesta del PSOE y el Bloc: Antoni Capellá y Matias Salom. El ente público ha ofrecido a ambos la posibilidad de continuar en otra función.

Complejidad


El proceso de elección de Terrassa, complejo y no exento de tensión en algunos momentos, zanja así, al menos hasta que entre en vigor la nueva ley del ente público que todavía tiene que iniciar su proceso de debate parlamentario, el debate sobre cuál debe ser el modelo de IB3, una televisión montada en época de Matas sin consenso parlamentario y que UM reclamó para sí hace tres años cuando se firmó el pacto de gobierno.

Antoni Martorell, hasta hace unas semanas director general (era el último de los cargos de la 'cuota UM' que aún se mantenía en su puesto hasta que presentó la dimisión) y María Umbert, la primera directora general del ente nombrada en época de Matas, acompañaron a Terrassa mientras el Parlament procedía a su elección. Fue a iniciativa del propio Terrassa, que luego elogió el trabajo de ambos.

En sus primeras declaraciones tras ser designado, Terrassa agradeció «a los partidos políticos del Govern» su respaldo y al PP su «voto de confianza». Añadió que es «una decisión valiente» elegirle a él, una persona con «un perfil profesional y técnico», para gestionar IB3 «a las puertas de unas elecciones». Terrassa, además, dejó claro que el ente se guiará por criterios profesionales e «informativos», sin interferencias politicas. Una de sus primeras decisiones será elegir al sustituto de Víctor Àlvarez en IB3-Rádio.

Para el president Antich, que apostó personalmente por el nuevo director general, Terrassa es «una persona responsable» que «entiende muy bien cuáles son los objetivos de IB3».