El portavoz del PP en el Consell, Pere Palau, aseguró ayer que la modificación del Plan Territorial Insular (PTI) que prepara el equipo de gobierno «aumentará mucho» la superficie inedificable de la isla. «Buena parte de Eivissa quedará protegida», indicó Palau, que aseguró que desde el Consell no les han querido dar una cifra concreta ni facilitarles planos para poder ver cuál es el aumento. «Están engañando a los ciudadanos, pero nosotros no nos dejaremos engañar», señaló él dirigente popular, que recordó que los terrenos con pendientes de más del 20% quedarán inedificables. «El que conozca un poco la configuración geográfica de Eivissa sabe que es muy fácil que haya una pendiente del 20% en un solar de 30.000 m2», indicó Palau, que también se refirió a la inedificabilidad que van a tener las masas boscosas de la isla y es que muchas de ellas serán Àreas de Protección de Riesgos (APR) de incendios y no se podrán construir.

«Trampa»

Según Palau esta medida es «una trampa», ya que en los últimos años la actividad agraria no ha sido rentable y «han proliferado los pinos en zonas donde incluso antes se labraba». «Si han crecido un par de árboles eso ya no se podrá construir», añadió el popular, que cree que les ocultan cuánta superficie protegida queda. «Yo tengo una idea de lo que puede ser y es una verdadera barbaridad; seguramente quedarán muy pocas zonas en las que se pueda hacer algo, porque los terrenos planos como el pla de Sant Mateu o de Corona ya tienen una protección especial», añadió el dirigente del PP, que recordó que el PTI que ellos aprobaron ya dejaba más del 50% del territorio con alguna protección especial. «La postura del PP está muy clara, esta modificación del PTI no es necesaria porque ya tenemos uno aprobado desde hace cinco años; todos los agoreros decían que se iban a urbanizar zonas protegidas, pero la experiencia ha dicho que era pura demagogia porque era un PTI bastante restrictivo y muy proteccionista», indicó Palau, que opina que la modificación sólo introducirá más inseguridad jurídica en un momento de crisis. Asimismo, considera que no sólo se vulneran los derechos de los propietarios, sino que también se paralizará la actividad de pequeños empresarios como fontaneros, obreros o carpinteros. De hecho, cree que la moratoria «ha contribuido a la crisis».

En resumen, Palau ve que no hay voluntad de consenso por parte del equipo de gobierno, ya que el conseller Miquel Ramon se mostró «reacio» a pasarles los planos durante el encuentro que mantuvieron el lunes. «Si el consenso es llamarnos a una reunión con Tarrés y Ramon en la que nos expliquen cuatro cosas y no nos den planimetría mal vamos», indicó el portavoz, que ya augura que es posible que no apoyen el PTI en el pleno de final de mes, cuando se quiere llevar el documento. De hecho, considera que Tarrés sólo aprobará el PTI para mantenerse en el poder y evitar la ruptura del pacto de gobierno «en contra de los intereses generales».

Los constructores creen que se protegerá mucho suelo rústico

El presidente de los constructores de la Pimeef, Joan Roig, lamentó que en la reunión con el Consell no se les facilitaran planos para poder ver en cuánto se incrementa exactamente la protección del suelo rústico de la isla. «Fue una reunión muy general con la Cambra de Comerç y los hoteleros y no pudimos analizar ningún documento ni trasladarles las mejoras que haríamos», indicó Roig, que consideró «correcto que no se toque la edificabilidad, las parcelas y la ocupación». Eso sí, consideró que el hecho de que se prohíba construir en pendientes de más del 20% (ahora el máximo es el 40%) y de que se conviertan en inedificables las APR de incendio incrementará mucho el suelo rústico protegido. «Parece que afectará a muchos metros cuadrados, pero no queremos decir nada hasta que no veamos los planos», indicó Roig, que quiere saber el «alcance real» que tendrán estas restricciones.Desde la demarcación pitiusa del Col·legi d'Arquitectes no quieren pronunciarse hasta que celebren la junta de mañana.

El GENpide que dejen de reunirse y aprueben ya el PTI

El grupo ecologista GEN también mantuvo un encuentro con el conseller de Política Territorial, al que pidieron que deje de celebrar reuniones y que apruebe «ya» el PTI. «Llevamos tres años esperando y debería estar aprobado hace ya un año, por lo que consideramos patético y ridículo que nos llamen a reuniones ahora», indicó la dirigente del GEN Neus Prats, que cree que el documento debe aprobarse ya y luego ya podrán presentar alegaciones y reunirse. De hecho, no le transmitieron ninguna opinión a Ramon sobre el contenido del PTI porque quieren que se apruebe cuanto antes. Prats cree que la idea de celebrar reuniones antes de su aprobación es sólo una estrategia para poner más trabas al documento argumentando que no hay consenso. «Hacen sesiones extraordinarias en el Parlament para aprobar leyes a la carta para salvar infracciones urbanísiticas y a nadie le importa que el PTI, que era una promesa electoral, no se apruebe, no interesa avanzar, aunque sea milimétricamente en la protección del territorio».