«No me planteo volver, pero me gustaría mucho hacer un proyecto para Eivissa»

La sede central del Instituto Cervantes, en Madrid, acogió hace unos días la presentación del libro Castilla-La Mancha y Nueva York (Ediciones Lunnwerg-Grupo Planeta), del fotógrafo ibicenco Víctor Prieto. Un encargo institucional, dirigido por José Talavera, que compara en imagenes La Mancha con la Gran Manzana. Se trata del «primer proyecto importante a nivel profesional que hago en fotografía», apuntó ayer a este periódico el autor, quien hace ya bastantes años dejó su isla para abrirse camino en otra de sus vocaciones, la de actor. «Entonces tenía la fotografía más bien como hobby, pues mi atención estaba centrada en la interpretación; pero me tocó una crisis muy mala en este campo y me centré más en la fotografía, pero sin dejar el teatro y los otros campos afines a la escena», añadió.
Precisamente, el teatro fue el punto de conexión con el proyecto del libro. «Me aceptaron en el casting de El zoo de cristal, y el director era precisamente José Talavera, un personaje polifacético con quien hice buenas migas desde el principio. Al terminar la obra surgió el proyecto del libro, y como es una persona muy generosa que valora mucho el trabajo de los amigos, al haberle mostrado fotos mías de un viaje a Nueva York, pensó que sería el fotógrafo oportuno para el proyecto», relató Víctor Prieto.
Y el resultado es ese grueso volumen, «que se está promocionando bastante, por las ciudades de La Mancha, claro, pero también a nivel nacional y por internet». Además, a través del consejero de la Embajada de Estados Unidos en España, quien asistió a la presentación del libro en el Instituto Cervantes, y de su directora, Carmen Caffarel, se está intentando que el libro sea presentado en Nueva York, «que sería estupendo», consideró el fotógrafo.
Por el momento, Víctor Prieto sigue residiendo en Madrid, dedicado a la fotografía y perfeccionando su técnica. «Profesionalmente, no me planteo volver, pero me gustaría mucho hacer un proyecto para Eivissa, porque tengo un poco abandonada la isla. He de pensar y estudiar qué es lo que no se ha hecho aún en el campo de la fotografía, para plantearme algo que fuera original, ya sea sólo o colaborando con alguien. Veremos».
En cuanto al género fotográfico por el que se siente más interesado, Prieto parece tenerlo claro: «En el que estoy más cómodo, porque es en el que tengo más experiencia, es en el paisaje, tanto natural como urbano. Pero también me interesan mucho los temas del retrato y del desnudo artístico, pues les veo mucha posibilidades de expresión y de desarrollo técnico», precisó.
Tampoco rechaza las grandes posibilidades que ofrecen a la fotografía las nuevas tecnologías, pero con reservas: «Es un campo que te permite hacer todas las diabluras que se te ocurran, pero me gusta más la naturalidad. Estoy en contra de la excesiva manipulación. Por ejemplo, siempre que hago un retoque en un retrato, intento que sea muy sutil. No quiero deshumanizar al modelo con una perfección que resulte falsa», consideró.
Por lo que hace a planes de futuro, Víctor Prieto quiere «seguir con la fotografía, pues me llena bastante y es lo que más me gusta hacer; aunque tampoco olvido que mi vocación primera fue la interpretación; pero es un mundillo muy complicadoy difícil en estos momentos para salir adelante. Y lo mejor sería poder alternar las dos facetas, claro», concluyó, ofreciendo al lector su web