La bahía de Talamanca es desde ahora una playa 100% adaptada. A la accesibilidad aportada por las rampas, a la silla de baño para personas con movilidad reducida, y al área de actividades lúdico terapéutica, suma también un novedoso sistema de baño para invidentes, el primero de todo Balears.
El Ayuntamiento de Eivissa presentó ayer este punto de baño adaptado, denominado 'Audioplatges' que permite que las personas ciegas o con visibilidad reducida puedan entrar y salir del agua de forma autónoma.
En tierra, el sistema permite a los invidentes llegar hasta el punto de baño mediante un tótem receptor que activan con el mando universal del que disponen para guiarse con los semáforos. Una vez allí, cuentan con palos para posicionarse en la playa y dejar sus pertenencias, ubicados junto a otro tótem, esta vez más cerca de la orilla, donde pueden colgar el bastón antes de ir al mar. A la hora de darse un baño, las personas invidentes se guían hasta la orilla mediante un sistema de balizas sonoras, unidas a una cuerda, y que les indican la entrada al mar. Se completan otras boyas, también sonoras, que a su paso les informan de la profundidad y la distancia (en metros) a la que se encuentran de la orilla. Además, las personas invidentes tendrán también un reloj con botones de emergencia para llamar al socorrista de la playa.
Según explicó el concejal de Participación Ciudadana, Vicent Ferrer, este sistema también está destinado a personas con todo tipo de discapacidad, por ejemplo, con movilidad reducida, además de personas mayores, debido a que les aporta seguridad.
Asimismo, Ferrer destacó que la bahía también cuenta con hoteles con habitaciones accesibles, que completan el 100% del proceso de adaptación de Talamanca para ser utilizada y disfrutada por personas discapacitadas.
Torres: «Cuando queremos salir del mar no sabemos donde estamos»
El director de la ONCE en Eivissa, Mariano Torres, dio ayer la «enhorabuena» al Consistorio «por ser los pioneros de Balears y los primeros de España en poner este sistema». Torres, que colaboró con el Ayuntamiento en su implantación, explicó que «es un sistema específico para personas ciegas o deficientes visuales, pero que también pueden aprovechar todo tipo de personas que tengan una movilidad reducida». En este sentido, destacó que el sistema dará solución al principal obstáculo que tienen las personas invidentes o con visibilidad reducida cuando van solos a la playa. «El problema que tenemos es que sabemos cuándo entramos en el mar pero, cuando queremos salir, no sabemos dónde estamos si estamos solos. Y con este sistema sabes siempre donde estás», destacó. Según Torres, la ONCE reúne a 130 personas en Eivissa y Formentera, que son invidentes, tienen deficiencias visuales graves o plurideficiencias, debido a que tienen ceguera a la vez de otras discapacidades, ya sean intelectuales o motoras.
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