Redacción Local26/02/10 0:00
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El paro y la inestabilidad laboral, así como los problemas económicos, siguen siendo las cuestiones que más preocupan a los baleares y no dejan de estar presentes en la mayoría de las conversaciones, según los datos del último Cuaderno de la Fundació Gadeso.
No es de extrañar, pues, que sean todavía pocos los que confíen en que el final del túnel de la crisis económica se pueda vislumbrar este mismo año. Según el estudio, sólo un 35% de los ibicencos y un 37% de los formenterenses creen que la situación económica será mejor en 2010 que lo que fue en 2009.
Es cierto que quienes consideran que lo peor está por llegar son minoría, con un 12% en la Pitiüsa del Norte y un 11% en la del Sur, pero también es cierto que en ambas islas un 41% de los encuestados considera que este será un ejercicio de transición y que las cosas ni mejorarán ni empeorarán.
Un dato llamativo de la encuesta es que, si la previsión de evolución general de la economía presenta unos datos ligeramente optimistas (al menos la situación no empeorará), cuando se pregunta a los entrevistados por la creación de empleo, estos contestan mayoritariamente que se mantendrán los niveles de paro.
En Eivissa, un 62% de los encuestados cree que no se generará empleo, mientras que el 58% de los formenterenses opina lo mismo. Por el contrario, quienes opinan que se logrará reducir las listas delparados suman el 28% y el 32% de la población de cada una de las islas.
Con estas perspectivas de futuro, no resulta raro que la valoración general de la situación económica actual se sitúa en un 4,3 sobre 10 en el caso de Eivissa, y una décima más en el de Formentera.
Retraso de la jubilación
La encuesta de Gadeso incluye también varias preguntas sobre la propuesta de jubilación a los 67 años, si bien los resultados que se ofrecen son a nivel balear y no por islas. Sobre el aumento de la edad de jubilación, el 82% de los encuestados se opone a esta medida, porcentaje que se eleva hasta el 93% si se les interroga sobre la aplicación obligatoria de esta medida.
Resulta curioso que esta propuesta del Gobierno presente menos rechazo que una que ya está en práctica puesto que sólo el 2% de los baleares apoya las prejubilaciones.