Con la que está cayendo, bajar únicamente un 2,5% en el tráfico de pasajeros de los puertos dependientes del Estado en las Pitiüses puede que no sea una buena noticia, pero para nada se puede considerar como un mal dato. Autoritat Portuària de Balears (APB) ha publicado sus estadísticas de octubre, cifras que permiten completar el ciclo turístico y extraer como balance que Vila y la Savina han cerrado esta temporada con 1,38 millones de pasajeros, apenas 36.000 menos que un año antes.

Hablando en términos globales, el grueso de tráfico lo generan entre si ambas islas. Y estos trayectos han soportado el 'annus horribilis' turístico con tal entereza que, incluso, han mejorado los datos de 2008 de forma que el trasiego de viajeros entre las Pitiüses ha pasado de 885.000 personas a casi 899.000.

Viajes fuera

Los datos de este tipo de navegación están muy condicionados por el propio uso que hacen de los barcos los residentes en Eivissa y Formentera. También los viajes de los pitiusos tienen un peso importante en las conexiones con Palma o los puertos peninsulares, pero aquí se puede apreciar mejor la influencia del turismo. Y aquí las cosas no han ido tan bien. Según los datos de la APB, la navegación de este tipo (denominada 'de cabotaje') sumó la temporada de 2008 un total de 467.900 viajeros. Este año, se han superado ligeramente los 405.000.

Si los trayectos interislas daban buenas noticias y las conexiones con el exterior malas, el caso de la llegada de turistas de crucero han ofrecido este año unas nuevas excelentes. Ha sido la tónica general durante todo el verano: llegaban menos buques a Eivissa y Formentera pero, en conjunto, desembarcaba en las Islas un mayor número de turistas.

Oficialmente, el periodo entre mayo y octubre de este año se ha saldado con más de 98.200 viajeros arribados a nuestros puertos, cifra que representa 20.600 más que los 77.600 del pasado año o, lo que es lo mismo, una cuarta parte más. En lo que va de año la cifra total se sitúa entorno a los 106.500, 25.500 más que un año antes.

Todo ello con media docena menos de buques atracados en las radas pitiusas, que han acogido hasta el 31 de octubre a 99 cruceros. Según los datos de la APB, desde entonces sólo hay que sumar el atraque en Vila del 'Wind Star', escala que cierra las previsiones de arribadas de este tipo de buques a las Islas, de forma que los datos sobre llegadas de cruceristas son casi definitivos.

Las cifras siguen siendo todavía muy bajas en comparación con Eivissa, pero las conexiones directas entre Formentera y la Península han funcionado este año considerablemente mejor que el pasado año. En total, en la presente temporada han sumado casi 11.800 viajeros mientras que en el mismo periodo del pasado año se quedaron en sólo 5.000. No va tan bien el asunto de los cruceros. Aunque han llegado más buques (13 frente a 9), se ha pasado de 1.925 cruceristas a sólo 1.416.