La alcaldesa de Vila, Lurdes Costa, junto con la concejala de Educación, Irantzu Fernández, recibieron ayer por la mañana en la sala de plenos de Can Botino la visita de una veintena de alumnos de secundaría de los institutos Santa Maria y Sa Colomina.
Estos alumnos, recién llegados a la isla proceden de lugares tan diversos como Marruecos, Rumania, Nigeria o República Dominicana, y empezaron este curso con clases de refuerzo de lengua «para que no se pierdan ni en las clases ni en el desarrollo de sus actividades cotidianas», informó el Consistorio de en un comunicado. Antes de llegar a Can Botino, los jóvenes realizaron una visita guiada por el núcleo histórico de la ciudad, para conocer mejor la que será ahora su nueva ciudad.
Los alumnos, que ya hablan un catalán correcto, se interesaron por las funciones de la sala del plenos, dónde se sientan los regidores, así de cómo funciona el sistema de elecciones municipales y la colocación de las banderas de la sala.
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