El presidente del Consell d'Eivissa, Xico Tarrés, declaró ayer que ha hablado con su homólogo de Formentera, Jaume Ferrer, ambos presentes en el Día de Balears en la feria turística de Londres, y que éste la ha dicho que entiende las críticas recibidas por su actuación durante la inspección de los comisionados de la Unesco que tienen que elaborar un informe tras la denuncia del GEN-GOB por el proyecto del puerto.

Sobre la asociación ecologista señaló: «El Gen ha hecho su papel, pero habría que hablar más, decir 'me preocupa esto o lo otro'». Fue, sin embargo, más duro con el papel del Institut d'Estudis Eivissencs (IEE): «Lurdes [Costa, alcaldesa de Vila] me dice que tenía una carta a la Unesco porque el Institut había pedido poner [Eivissa] en la lista de peligro y me parece mal. ¿Hemos agotado todas las vías de diálogo? Cuando lo hayamos agotado lo último es decir que le quite el Patrimonio a Eivissa»

Tarrés, que fue alcalde cuando la candidatura de Eivissa recibió el nombramiento de Patrimonio de la Humanidad, recordó ayer: «Tenemos que acostumbrarnos a que las cosas que podamos las arreglemos entre nosotros». «Si les preocupa dónde se tiran los fangos que pregunten o propongan, pero si se duda quizás tan sólo es pedir al Govern que vigile y para eso no hace falta que tenga que intervenir la Unesco». «Es un problema con el Ministerio, con al Autoritat Portuària y con el Govern balear, que lo puedan resolver».

Limitaciones

«Y si lo que quieres es tener una ampliación de la declaración [para figurar también nominalmente en ella] no vas a ir a pedirla a la Unesco sino que antes tenemos que discutir mucho. No puede formar parte de la declaración cultural, sino de la natural, de la posidonia, en la que ellos no tienen competencias, sino que es de Medio Ambiente», explicó.

Por eso declaró: «Cuando el ministerio diga 'vale', pues se irá a Unesco, se pedirá y te lo darán o no te lo darán , pero no se puede poner en riesgo una declaración como la de Eivissa porque yo tengo una pataleta. No, está mal. Yo lo he hablado con el presidente de Formentera [Jaume Ferrer] y ha dicho que lo entiende».

Sobre sus socios de gobierno señaló: «No tengo entendido que [Eivissa pel Canvi] haya pedido que se ponga [Eivissa] en la lista de lugares en peligro; ellos tenían su opinión, que ya conocíamos, y ya habíamos planteado que nos parecía la menos mala era la que se ha escogido y que hay qu tirar adelantre porque lo primero es salir del entorno actual, que es peligroso, porque resta calidad a un entorno privilegiado y porque te puede venir cualquier día la UE y decir que en este puerto no se trabaja más».