Padres de alumnos del instituto Blanca Dona han decidido iniciar un calendario de actuaciones de protesta hasta que se les notifique el inicio de las reformas de manera continuada y revisada. Una treintena de padres se concentraron ayer en la puerta del centro educativo durante el recreo de la mañana. Mientras tanto, en el interior alumnos y profesores protagonizaban una sentada como medida de protesta.
Estas medidas se adoptan a raíz de las deficiencias detectadas en el centro que afectan al sistema eléctrico, el depósito de gasoleo, el sistema de contraincendios, la caldera de calefacción, problemas de seguridad respecto a la estructura de las escaleras y peligro de hongos y bacterias en los baños del gimnasio.
Belén Garijo, portavoz de los padres de alumnos, señaló ayer que con estas medidas no se pretende «crear ningún tipo de alarmismo ni interferir en el correcto desarrollo del curso» recordando que profesores, alumnos y personal continúan asistiendo al instituto. «Lo sentimos como nuestra casa pero tampoco permanecemos impasibles ante la actual situación».
Seguridad
Con estas medidas se trata de «resolver lo antes posible las carencias que presenta el edificio; eso no quiere decir que el edificio sea inseguro sino que no reúne las condiciones de seguridad elementales».
Los padres continuarán concentrándose hoy y el lunes. Además se seguirá con la recogida de firmas pidiendo un instituto más seguro. El lunes está previsto que la Asociación de Padres y Madres de Alumnos vuelvan a mantener una reunión para decidir las actuaciones que se han de seguir.
El equipo directivo de Blanca Dona presentó su dimisión el pasado 23 de octubre «ante la imposibilidad de asumir la responsabilidad de garantizar la seguridad de la comunidad educativa», recordaron ayer los padres. Aseguran que desde hace tres años, la dirección del centro ha llevado a cabo diversas acciones para subsanar las deficiencias de las infraestructuras. La APA ha mostrado su apoyo al equipo directivo y su compromiso de colaboración para resolver la situación que afecta al instituto que alberga, también, la Escuela de Idiomas.
La APA mantuvo una reunión ayer con la delegada de la Conselleria d'Educació en Eivissa, Margalida Marí, en la que ésta les comentó que se está agilizando al máximo la tramitación de licencias para iniciar cuanto antes las obras en el centro. «Es más o menos lo que hemos leído en prensa estos días, pero de momento no tienen un plan de obras concreto, así que nosotros seguiremos con nuestra protesta, a no ser que en las reuniones de mañana (por hoy) o el lunes se cambie de postura», señaló Belén Garijo, portavoz del Apa
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