C.A.

El delegado de la rectora de la Universitat de les Illes Balears (UIB) para la sede de Eivissa, David Pons, calificó ayer de «buena, adecuada por la situación geográfica e ilusionante por las posibilidades de futuro para incrementar la oferta universitaria en Eivissa» la propuesta del Consell de trasladar los estudios universitarios a sa Coma descartando finalmente la Comandancia. «Estoy muy ilusionado con sa Coma», añadió.

El Consell d'Eivissa les comunicó hace un mes la posibilidad de ir a sa Coma. «Estamos abiertos a cualquier situación que suponga la ampliación de las infraestructuras y visitamos sa Coma», explicó el delegado de la rectora. En la visita comprobaron que «las posibilidades de Sa Coma eran mayores por el número de hectáreas que tiene». Al traslado de la UIB a sa Coma se suma el de la Universitat Oberta de Catalunya, la UNED, la Escuela Oficial de Turismo y la de Idiomas, «aspecto que valoro positivamente, no vamos a entrar en competencia con universidades y cuantos más alumnos se decanten por hacer un grado será bienvenido». De hecho, asegura que permitirá crear en el campus de Sa Coma, «sinergías comunes como una biblioteca central o instalaciones deportivas de las que carecemos la actual sede».

Recelo por el espacio

La UIB arrastra un problema de espacio en la sede actual que le limita la posibilidad no sólo de hacer estudios de grado sino también de oferta complementaria, como los cursos para mayores o el reciclaje de catalán, por lo que Pons asegura que «cualquier posible ampliación parece adecuada». En cuanto al proyecto de la Comandancia Militar, Pons señaló que «había un cierto recelo en cuanto a la accesibilidad y el problema de aparcamiento que podía haber en la Comandancia», además de la limitación del espacio. No obstante, el proyecto fue bien acogido ya que podría mejorar los servicios.

En cuanto a la sede actual de la UIB, una concesión del Consell a la institución académica, «pasaría a manos del Consell si nos ofrece un servicio mejor dotado con más superficie», como el caso de sa Coma.

Alumnos de la UIB consultados ayer, como Alexander Villa, manifestaba que «siempre que sea un aumento y mejora de las instalaciones será satisfactoria». Una de las quejas de los alumnos era precisamente el del aparcamiento.

La UIB no entró a valorar si este traslado a sa Coma supondrá un retraso en la mudanza prevista inicialmente para la Comandancia. «No entramos ahí porque es un tema de financiación por parte de las instituciones políticas para que se inicien las obras», señaló. No obstante, precisó que el traslado no se podrá efectuar «hasta que esté totalmente acaba la reforma y la construcción del edificio correspondiente». A la UIB, en este sentido, no le interesa mantener los estudios dispersos entre la sede actual y Sa Coma «porque tendríamos que duplicar costes de servicios administrativos y no poder ofrecer el servicio adecuado a los alumnos». «Nos mudaremos cuando tengamos la casa en condiciones. Nos queremos ir con todo hecho. Tenemos el sistema de videoconferencia y necesitamos que esté todo preparado para la adaptación del edificio a estos nuevos usos», explicó.