Uno de los imputados en la trama Gürtel, Jacobo Gordon, cuenta con promociones de viviendas en Eivissa valoradas en 13 millones de euros. Así lo asegura el periódico Público, que revela que Gordon ha invertido en Eivissa a través de Proyectos Inmobiliarios Proavitante, donde tiene un 50% de participaciones de su empresa Real Estate Equity Portfolio. A su vez, esta última empresa es socia de Procasa, que tiene una promoción en Cala Tarida, en segunda línea de mar.

Proavitante también es promotora de un edificio detrás de Pachá, en segunda línea del paseo marítimo de Vila, que comercializa Procasa, según anuncian en su página web, aunque actualmente Procasa está en situación de concurso de acreedores. En el cartel de la obra de Vila, que tiene los cimientos terminados, se indica que la promotora es Proavitante y la constructora Ortiz Construcciones y Proyectos, una de las empresas que hizo de la autovía al aeropuerto. Asimismo, una de las arquitectas es la ex concejala de Sant Antoni Blanca Castiella, imputada por el caso Cretu.

Se da la circunstancia de que Gordon fue testigo de la boda de Alejandro Agag y Ana Aznar y es ex socio del yerno del ex presidente del Gobierno. El empresario cuenta con suelo valorado en 64 millones en toda España, según la información de Público. Proyectos Inmobiliarios Proavitante tiene domicilio en Eivissa en la calle Hort de sa Fruita S/N, en el paseo marítimo.

También el cabecilla de la trama Gürtel, Francisco Correa, es propietario de una casa en Cala Sant Vicent a través de la sociedad Osiris Patrimonial. Esta empresa tiene un capital social de 5 millones y fue constituida el 15 de junio de 2005 con un capital de 60.000 euros. En el sumario también se recoge que Correa no quiere sacar dinero de Osiris para poder acabar con esos fondos su casa de Eivissa.

El empresario Gonzalo Raga, imputado por estafa, alquiló un yate en el puerto de Eivissa en el que agasajó a varios imputados del caso Gürtel. Estos empresarios viajaban gratis en el yate de lujo, según asegura El Cofidencial, y disfrutaban de suculentas comidas a bordo y en tierra, pernoctaciones en hoteles de cuatro y cinco estrellas y entradas a discotecas. Según la misma fuente, Raga obtuvo decenas de contratos de los municipios de Madrid donde gobernaban sus invitados.

También Francisco Correa cerró algunos de sus negocios en Eivissa. Por ejemplo, estuvo tramando la creación de un partido político para ganar las elecciones de Majadahonda con dos ex concejales del PP. Según recoge el periódico La Razón, este proyecto se fraguó en Eivissa.