Si las presiones por los posibles efectos negativos sobre el Patrimonio de la Humanidad no lo impiden, el proyecto de reforma del puerto de Vila que ha planteado la Autoritat Portuària de Balears (APB) permitirá que la nueva explanada y pantalanes de es Botafoc disponga de espacios de atraque suficientes para que amarren en ellos hasta cinco buques de gran tamaño, según expone la memoria básica del proyecto.

Según este documento, los laterales de cada uno de los pantalanes (también denominados muelles transversales) podrán acoger a un navío de hasta 200 metros de eslora, si bien es posible que pudieran operar buques de mayor longitud.

Así se desprende que el proyecto apunte que «en el extremo de cada uno de estos muelles transversales, se colocarán dos duques de alba (pantalanes de menor tamaño) pilotados, para el amarre y atraque de las embarcaciones de mayor eslora». Dichas áreas de trabajo estarán a una distancia de 16 metros de los muelles y se comunicarán con ellos con una pasarela peatonal.

Los muelles transversales ofrecerán en conjunto cuatro puntos de atraque. La quinta área de amarre tendrá unos 220 metros de largo y estará situada entre el actual dique de es Botafoc y el pantalán más cercano.

Calado suficiente

La operación de estos buques de grandes dimensiones se realizará garantizando un calado superior a los 10 metros en toda la zona aneja a las nuevas infraestructuras, si bien se apunta que se podría incrementar en el futuro en algunos puntos hasta los 13,4 metros realizando una nueva extracción de materiales del fondo, un dragado «pequeño» según apunta el redactor de la memoria.

La importancia de estas características técnicas se puede comprobar atendiendo a que el anejo 'Datos básicos y criterios de diseño' utiliza parámetros de ferrys como el 'Sorolla', de Transmediterránea, de 172 metros de eslora y 6,2 de calado. El 'Abel Matutes' que entrará en servicio en breve con Baleària contará con 191 metros de eslora.

Además de construir la explanada y los nuevos muelles, el proyecto de la APB incluye una propuesta para remodelar el vial que conecta la entrada del puerto de Marina Botafoch con el dique actual.

Para aumentar la seguridad, se implantarán arcenes de medio metro a cada lado del firme asfaltado, mientras que para proteger mejor los servicios (alcantarillado y otros) que hay en el subsuelo, se aumentará el tamaño de la base de relleno del carril lo que, en la práctica, supondrá que éste se eleve un metro respecto a su nivel actual. Esta medida tendrá otra consecuencia, según el documento: «proporcionará una mejor panorámica del mar a peatones, ciclistas y ocupantes de vehículos que circulen por el vial».

De igual forma, el carril bici será trasladado al otro lado de la calzada, de tal forma que se eviten las interferencias con los accesos y salidas a los nuevos muelles. Este espacio reservado perderá medio metro de ancho (se quedará en 2 metros) y estará separado de la calzada y del arcén mediante una zona de adelfas.

Por último, se eliminará el firme adoquinado, que se cambiará por una superficie asfaltada «que se adapte mejor al tráfico pesado».