PATRICIO CANDIA

Los fiscales anticorrupción de Balears Juan Carrau y Pedro Horrach denuncian en las diligencias informativas, ahora en poder del juez instructor del 'caso Palma Arena', José Castro, que el ex presidente del Govern Jaume Matas se gastó el sueldo de presidente del Govern de un año y medio (unos 6.000 mensuales) en artículos de lujo, hasta alcanzar la cifra de 99.000 euros.

Sólo en la adquisición de bienes inmuebles y efectos en diversos establecimientos de Mallorca por parte de Matas y de su mujer Maite Areal, alcanzó los 500.000 euros, pagados gran parte de los mismos en efectivo. Tras la prolija investigación el juez ultima la citación de Matas en calidad de imputado.

Maite Areal, «a título de ejemplo», según las diligencias, adquirió en un periodo de 4 meses efectos en un establecimiento de joyería de Palma por un importe de 70.000 euros, abonándolo todo en efectivo. La investigación realizada por la Guardia Civil abarca un exhaustivo seguimiento del patrimonio de Matas y de su familia, dividido en seis apartados: La propiedad de un piso ubicado en un edificio catalogado de la calle San Felio de Palma (el «palacete»), la propiedad de una vivienda en la Colonia de Sant Jordi, el alquiler de un piso en la calle Ramón Cruz de Madrid, cuantiosas obras realizadas en sus pisos, compra de artículos de lujo, viajes, hoteles, entre otros. Ese alto tren de vida del ex presidente sólo fue posible porque «cobraba comisiones por adjudicación de contratos», según los denunciantes anónimos, tarea en la que participaron, entre otros, su cuñado Fernando Areal Montesinos, gerente del Partido Popular, Jaime Fluxá (que no ha identificado hasta ahora, de acuerdo al escrito del Ministerio Público, y Juan Antoni Ramonell, ex alcalde de Montüiri.

Enriquecimiento

Este diario ya ha informado de todas las hipótesis de trabajo empleadas por los investigadores para demostrar un supuesto enriquecimiento ilícito de Matas, entre ellas, la creación de sociedades tipo SIMCAV (Sociedades de Inversion de Capital Variable, que permiten realizar una politica de inversion flexible y aprovechar un ventajoso tratamiento fiscal) a efectos de canalizar el montante de las comisiones que percibía el PP por la adjudicación de obras públicas, «revirtiendo parte de este dinero a las personas que participaban en la trama» según los denunciantes.

En ese contexto, sitúan a Fernando Areal Montesinos «como la persona que organizó el sistema de canalización de comisiones», y subrayan que ese sistema «consistía básicamente en aportaciones por parte de las empresas constructoras a sociedades de inversión controladas por su cuñado».

Las diligencias, asimismo, detallan con minuciosidad los movimientos de las cuentas corrientes de las que son titulares Matas y su mujer Maite Areal.