El Consell Insular d'Eivissa comprobó esta semana que el edificio de la antigua Comandancia, que debe convertirse en la nueva sede de la Universitat de les Illes Balears (UIB) y de la Escuela Internacional de Turismo, sigue ocupado. De esta forma, la entidad ibicenca deberá seguir esperando a que un juzgado de lo contencioso-administrativo autorice el desahucio.

«Durante esta semana se ha enviado a un técnico del Consell para que revisara el recinto y ha podido comprobar que todavía sigue habiendo gente que habita en su interior», explicaron fuentes de la corporación insular.

«En la visita se contactó con estas personas para ver su predisposición para salir de allí de forma voluntaria y, aunque se trata de gente pacífica, de momento no parece que lo vayan a hacer», añadieron las mismas fuentes.

De esta forma, el Consell deberá esperar a que se dé curso a la orden de desalojo que permita acudir a la Comandancia junto con algunos agentes de policía para que, si no salen de forma voluntaria, se proceda a la expulsión forzosa.

Hace unas semanas ya se formuló un aviso previo para la veintena de personas que habían sido identificados como ocupantes del edificio.

Orden judicial

Desde el Consell se espera que la autorización judicial llegue a partir del martes (agosto es un mes inhábil para los tribunales contencioso-administrativos) y antes de que finalice septiembre.

De ser así, apuntaron desde la Administración insular, no se verían alterados los planes del Consell para iniciar en breve los trabajos de reforma del edificio para adecuarlo a sus nuevas funciones.