La Comisión Insular de Patrimonio (Ciotupha) aprobó ayer, con el voto en contra del PP, dar el visto bueno al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Vila aunque formulando algunas especificaciones que deberán ser incluidas en el texto y excluyendo las actuaciones previstas en las zonas de Cas Mut y Puig des Molins. Así lo anunciaron ayer los consellers de Política Patrimonial y Territorial, Marga Torres y Miquel Ramon.
La retirada de la primera de las intervenciones se basa en que «la Unidad de Actuación se clasifica como urbana sin justificar el porque y cómo se cumplen los requisitos para considerar los terrenos como urbanos», apuntó Ramon.
«Son asentamientos espontáneos, antiguos, pero que no justificarían la consideración de urbano de todo el ámbito por lo que se suspende la declaración hasta que no se aporte la documentación y justificación necesaria o se haga una delimitación más ajustada a aquello que puede acogerse a la consideración de urbano por la consolidación que ya tiene», añadió.
La zona de los molinos
Por su parte, la actuación en la zona de Puig des Molins queda aparcada hasta que no se redacte un Plan Especial de Protección diferente al que ya se estaba elaborando. «Al Ayuntamiento se le dice que éste ámbito, aunque está clasificado como urbano desde el anterior planteamiento, no cuenta con la consolidación de los edificios, no dispone de las infraestructuras urbanísticas necesarias, y sí que tiene elementos de un alto valor paisajístico y medioambiental y están en zona de respeto del conjunto histórico», apuntó Ramon.
Por todo ello, habrá que diferenciar entre zona rústica y urbana aunque ambas deberán estar incluidas en el Plan Especial de Protección.
Por su parte, Torres recordó que, desde el punto de vista patrimonial, se deben incluir en los catálogos de protección puntos «que forman parte del conjunto histórico». La consellera resaltó que toda la zona de Puig des Molins debe considerarse como integrada en el conjunto histórico de la ciudad, por lo que cualquier remodelación o demolición deberá hacerse documentando arqueológicamente la zona y autorizando únicamente las demolición de «elementos parásitos o distorsionadores» de los elementos históricos.
Sa Penya
Otras cuestiones aprobadas en el área de patrimonio fue la inclusión en los catálogos de protección de tres portales de feixa de es Prat de Vila y de varias viviendas de principios del siglo XX de la avenida de Sant Josep. Igualmente, se dio el «visto bueno» a la reforma de la Unidad de Actuación de las calles Alta y Retiro de sa Penya, una decisión que habilita a Vila a realizar expropiaciones, aunque cualquier intervención de reforma o derribo deberá ser avalada por la Ciotupha.
Ramon explicó que en la reunión de ayer de la Ciotupha se rechazó, con la abstención del PP, conceder el interés general para el campo de golf proyectado por Empresas Matutes en Platja d'en Bossa. «Una vez la Comissió Balear de Medi Ambient lo ha descartado no teníamos otra posibilidad», apuntó el conseller, quién reiteró que «la declaración incluye condiciones de respeto a los valores ambientales de la zona y si la Administración competente en la materia lo deniega, nosotros no teníamos otra salida».
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