La agrupación socialista de Vila salió ayer en defensa del concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Eivissa, Vicent Torres, cuya dimisión fue solicitada por el Partido Popular, tras acusarle de «falta de criterio político» en la gestión del nuevo Plan General de Ordenación (PGOU).

Según los socialistas, el PP está demostrando «su nerviosismo ante la inminente aprobación del PGOU» así como su portavoz, Virtudes Marí, «demuestra también sus ansias boicoteadoras y su nula voluntad de solucionar los problemas de la ciudad».

«El PP pretende que los ciudadanos olviden que son los responsables del Plan General de 1987, el mayor despropósito urbanístico que ha tenido nunca nuestra ciudad, y fruto del cuál Vila sigue hoy en día sufriendo problemas endémicos como la falta de escuelas, aparcamientos, plazas y espacios públicos o viviendas de protección oficial», acusan los socialistas en un comunicado.

Según la agrupación, el PP «sabe además que con el nuevo PGOU se reordena el crecimiento urbanístico, se prevén parcelas para nuevos servicios a los ciudadanos y se pone coto a macroplanes de construcción, protegiendo espacios tan emblemáticos como se Feixes, que los populares querrían ver enterrados en cemento». «Por todo ello, el PP quema sus últimos cartuchos arremetiendo contra el concejal de Urbanismo, ya que sabe que en pocas semanas se habrá acabado el tema de discusión», agregan.

Asimismo, los socialistas acusan al PP de «seguir con su estrategia de sólo criticar sin ofrecer ninguna propuesta en positivo» y de «pretender quemar al concejal y hacerle culpable de todos los problemas del municipio». «Habría que recordar al PP que personajes como el señor Font, conseller de Medi Ambient en la pasada legislatura, estuvieron paralizando durante toda la legislatura pasada proyectos tan importantes como la nueva depuradora», concluyen los socialistas.