El Ayuntamiento de Sant Antoni no cederá a la petición de la Asociación de Comerciantes que pide que los mercadillos que se instalan a diario en ses Coves Blanques y en la fachada marítima se integren en el pueblo para atraer el flujo de turistas a las tiendas.

Según explicó el concejal de Comercio, José Cardona Parentona, el mercadillo de ses Coves Blanques sí se trasladará cada viernes a la plaza de la iglesia y alrededores, «algo que ya estaba previsto», así como se intentará que los puestos de la fachada marítima también formen parte del mercado de los viernes en el interior del pueblo que se volverá a llamar Mercat de ses Places. «La intención es que también vayan a la plaza, si no es este viernes, el otro», apuntó Parentona.

Por otra parte, ante la amenaza de los comerciantes de hacer un paro de dos horas el próximo lunes en protesta no sólo por el modelo municipal de mercadillos sino también para exigir medidas contra la venta ambulante y las falsificaciones, el edil explicó que hará una reunión «entre esta semana y principios de la que viene» para evitar el cierre de los comercios.

En este sentido, destacó que si bien «se podrán llegar a algunos acuerdos» con los comerciantes indicó que hay cuestiones que «no se pueden solucionar en cuatro días» como es el tema de las falsificaciones. «Sé que por parte de la Policía Local se están haciendo algunos controles y que han cogido cosas falsificadas», apuntó.

En cuanto a los mercadillos, Parentona destacó que no entiende cómo pueden ser «una cosa tan mala para el comercio porque está en la zona marítima, a sólo 50 metros de distancia», y quiso recordar todas «las cosas positivas que ha hecho el Consistorio por los comerciantes como arreglos de calles, aceras, aparcamientos disuasorios y zona azul».