El conseller de Política Territorial, Miquel Ramon, confió ayer en que el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Vila pueda aprobarse en la Comissió balear de Medi Ambient este verano, para que el nuevo planeamiento urbanístico de la ciudad pueda comenzar a aplicarse con el inicio del nuevo curso.

Ramon explicó que queda pendiente un trámite con la Comissió balear de Medi Ambient, que debe dar su visto bueno al PGOU. En su día, este planeamiento ya se envió al máximo órgano ambiental balear, pero como la tramitación se ha alargado tanto, hay que volver a enviarlo porque la ley ha cambiado.

Ramon asegura que por parte de la Conselleria balear de Medi Ambient ya han mostrado su intención de agilizar al máximo el trámite, aunque el problema es que tendrán que analizar el planeamiento y el conseller teme que no se llegue a tiempo para la reunión de la comisión ambiental del mes de julio.

Miquel Ramon también confió en que no se tenga que someter de nuevo a información pública el PGOU. De hecho, destacó que tanto el Consell como el Govern intentarán colaborar en lo que puedan para agilizar al máximo este planeamiento, del que dependen infraestructuras como la Comisaría o varios colegios.