Cáritas Diocesana de Eivissa tendrá que cerrar programas si las diferentes administraciones no les pagan lo que les adeuda del año pasado, una cantidad que asciende a medio millón de euros y que supone el 60 por ciento del presupuesto anual que maneja la entidad. «Tenemos que afrontar la paga doble de julio. Si la administración no nos paga, es más que probable que Cáritas tenga que cerrar algunos programas, serán personas que no van a recibir atención porque no tenemos con qué», dijo ayer el delegado episcopal, Miguel Angel Sánchez. El obispo de la Diócesis, Vicente Juan, añadió que «si no se tiene para pagar a los técnicos se les tendrá que despedir y no dar el servicio».

Sólo el Servei d'Ocupació de les illes Balears, del Govern, les adeuda 31.000 euros pero están pendientes de los pagos de otras entidades del Govern, Consell, Ministerio de Trabajo o Fondo Social Europeo. Aseguraron que ha habido «pagos muy parciales por parte del Consell». El delegado episcopal aseguró que «las administraciones les dan constantemente largas y no tiene sentido que una parte del trabajo cotidiano del director es tener que ir limosneando a las administraciones para que cumplan»Â·

Cáritas participó anteayer en una reunión en Palma con otras entidades sin ánimo para reclamar a la administración lo que se les adeuda, como ha sido el caso del SOIB. Cáritas, junto a otras organizaciones de Eivissa, se presentó a una oferta pública en el último trimestre de 2008 en la que proponia que la entidad interesada contratara a alguna persona desempleada y que el SOIB se haria cargo de los gastos. «Fiados de la seriedad de la entidad contratamos a diversas personas mediante el convenio y terminado el plazo previsto en el convenio no ha llegado ni un céntimo a nuestras organizaciones, las cuales han debido satisfacer en su momento el salario mensual de aquellas personas, la Seguridad Social y otras obligaciones fiscales», aseguran. Una situación que les ha causado «un enorme perjuicio económico» y aseguran incluso que algunas de las entidades que firmaron «han entrado en la bancarrota». «La administración hunde a una entidad social sin ánimo de lucro por no cumplir el pacto de darle el dinero», dijo Sánchez. A Cáritas les «parece inmoral que el Govern, el SOIB, esté teniendo este comportamientoabusivo de quienes de buena fé conveniamos de acuerdo con su oferta» y tachan de «increíble» que, pese a lo que deben, vuelva sacar una nueva convocatoria. «Paguen lo que nos deben porque ya se ha cumplido el plazo y nosotros hemos hecho nuestro trabajo tal y como lo hemos pactado», reclaman.

Cáritas ha disparado su atención a los más desfavorecidos a raíz de la crisis. El director de Cáritas, Joan Marí, aseguró que «a finales de año se disparó la atención» colapsando algunos servicios. «El comedor social se ha visto desbordado desde hace meses. Hemos aumentado a un 46% las solicitudes respecto al año anterior. Ni contando con lo que da el Ayuntamiento de Eivissa en el albergue ni con lo que damos nosotros alcanzamos el número de personas que vienen a pedir una comida caliente», dijo el delegado episcopal, Miguel Àngel Sánchez. Cada día se pasan unas 60 personas a pedir una comida «pero nosotros sólo podemos atender a veinte, una tercera parte de los que viene no tienen una comida caliente, hay un desbordamiento absoluto de nuestras capacidades». En la actual situación, los usuarios del comedor son asiduos durante meses, una situación distinta a la de antes donde eran más temporales. «Los datos nos dicen que hoy es más difícil salir que hace unos meses», añadió Sánchez. Marí se refirió a la reducción de la temporada que ha pasado a sólo tres meses de trabajo y cómo afecta. «Muchos de los sin techo que llegan a la pretemporada con la ilusión de tener un trabajo no lo encuentran», dijo. Aseguraron que el número de personas sin techo supera ya los dos centenares de personas.

El delegado recordó que con la nueva ley de servicios sociales se asegura que «la comida, el vestido y el alojamiento serán satisfechos por las administraciones y si no lo son serán reclamables por los tribunales», recordó el delegado. Sánchez aseguró que habrá que estar «atentos» para que los ayuntamientos y el Consell «hacen las previsiones necesarias para dotarse de medios», como incluso un albergue.

Confiaron en que el centro de atención integral de atención social «esté construido cuanto antes porque la necesidad es imperios». Aseguró que este centro «no eximirá de responsabilidad a los ayuntamientos» de cumplir con la nueva ley de servicios sociales. «Cada uno tendrá que hacer un análisis de la situación concreta y ver qué parte queda cubierta con el centro común y que parte han de atender en su municipio».

Cáritas presentó ayer su memoria de 2008 coincidiendo con la celebración del domingo que viene del Día de Cáritas: «Es el día en el que intentamos cargarles las pilas en la Iglesia a los buenos cristianos, a las personas de buena voluntad, para seguir actuando», dijo ayer el obispo Vicente Juan Segura, que precisó que Cáritas no es una ONG católica. «Cáritas es la iglesia católica que actúa en un aspecto de su misión, el aspecto de la acción caritativa y social. Cuando actúa Cáritas no actúa una ONG cualquiera, sino la Diócesis de Eivissa, la iglesia de Cristo en Eivissa», explicó el obispo que presentó al director de Cáritas y al delegado episcopal como «las dos animas» que van coordinando el trabajo. Entre los datos hay que destacar que se han realizado más de 8.000 asistencias de carácter social y laboral; formación a casi a 300 personas; 94 ofertas de empleo, atendidas a 234 personas sin techo, gestionado 24 toneladas de comida y entregadas más de 1.200 lotes de comida, 34% más que en 2007, y 1.200 vales de ropa a 800 personas.