C. R.

El presidente de Esquerra Republicana en las Pitiüses, Josep Antoni Prats, atribuyó la fuerte bajada que ha sufrido su formación respecto a las últimas elecciones europeas al efecto arrastre que tuvo el ibicenco Bernat Joan en 2004, cuando fue cabeza de lista. «En Eivissa hemos bajado pero no es ninguna sopresa porque en las últimas tuvimos un extra de voto por el hecho de que el candidato fuera una persona de Eivissa», explicó Prats, que justificó así el descenso a la mitad en el número de votos obtenidos.

Se abre ahora un período de reflexión para analizar si se han perdido sufragios respecto a cuando fueron con la coalición Unitat per les Illes. «De todas formas, la base de voto que tenemos la mantenemos y ronda los 500 o 600; evidentemente queremos crecer y hay que buscar estrategias para crecer más como partido a partir de ahora», aseguró el presidente de ERC.

Prats considera que en estas elecciones ha habido «dos grandes malas noticias». La primera es que se mantiene la elevada abstención. «Algo tendremos que hacer para que interese más Europa», añadió el presidente de Esquerra Republicana, que indicó que la otra gran mala noticia es que el nivel de bipartidismo es cada vez más fuerte. De hecho, destacó que hay que estudiar por qué España es el país de la UE que tiene un voto más concentrado en los dos grandes partidos. De todas formas, cree que es una buena noticia haber conseguido el eurodiputado. «Nuestro objetivo se ha cumplido», remarcó.