Los problemas de transporte con el exterior que viven las Pitiüses no sólo afectan al turismo o a los viajes de placer de los residentes en las Islas. Para un cuarto de los habitantes esta circunstancia afecta también directamente al desarrollo de su trabajo puesto que desarrollan su labor en otra autonomía o, incluso, en otro país.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) referentes a la movilidad laboral de los residentes en Eivissa, los porcentajes de residentes que deben salir de Balears para trabajar oscilan entre el 22% de Vila y el 74,9% de Sant Joan. En éste último municipio incluso se registra un 0,7% de ciudadanos que sitúan su puesto de trabajo fuera de España.

Por contra, los niveles de trabajo en el propio municipio no suelen llegar al 5%, excepción hecha de Santa Eulària, donde se alcanza el 5,9%. En este sentido, Eivissa, con un 1,7%, es la población en la que se da menos esta circunstancia.

Mismo municipio

Lo más habitual es que los residentes de cada uno de los municipios no tengan que desplazarse a otros para poder trabajar (como resulta lógico, en Vila más de la mitad de los residentes trabaja también en la ciudad). La única excepción es Sant Josep, donde un tercio de los residentes afirman tener que salir del término municipal para acudir a su puesto laboral.

Por último, los porcentajes de ciudadanos que aseguran que su puesto de trabajo está situado en varios municipios (el INE no especifica si se trata de trabajadores de medios de transporte, comerciales o pluriempleados) oscila entre el 2,3% de Sant Joan y el 7,7% de Santa Eulària.

La cercanía de los puestos de trabajo que parece desprenderse de los datos anteriores se confirma cuando en la mayoría de los municipios los encuestados por el INE apuntan a que tardan menos de 10 minutos de su centro de trabajo.

Las únicas excepciones son Sant Joan (claramente condicionado por la necesidad de desplazarse fuera de Balears) y Sant Josep.

Los residentes en Eivissa recurren muy poco al autobús o a fórmulas de desplazamiento 'limpias' como la bicicleta o andar. Los traslados en coche oscilan entre el 54,1% de Vila y 85,4% de Sant Josep. El autobús sólo consigue un 4,4% en Vila, llegando a caer hasta el 1,5% en Sant Joan. La bicicleta aún acumula peores registros, hasta el punto de que en Santa Eulària y Sant Joan no es nombrada por ningún encuestado. Los desplazamientos a pie tienen una suerte desigual y, mientras a penas logran el 2,5% en la villa del río, en Sant Antoni suponen el 21,5% y el 34,4% en Vila.