S. Carbonell01/06/09 0:00
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La crisis económica que está viviendo el mundo ha provocado una elevada destrucción de empleo en todo el Estado español y también en Balears.

Los contratos indefinidos han bajado en un 33,25 por ciento en abril de 2009 con respecto al mismo mes del año anterior pasando de 6.603 contratos indefinidos en 2008 a sólo 4.407 este año.

Pero la contratación indefinida no ha sido la única que ha notado la sistemática destrucción de empleo, de hecho, según los datos de los que dispone el Observatori Laboral de la Conselleria de Treball i Formació, la contratación eventual también ha bajado en más de un 30 por ciento, pasando de 33.646 contratos de duración determinada en abril de 2008 a 23.450 durante este año.

En comparación con el año anterior todos los tipos de contratos muestran una evolución negativa, incluida la contratación fija discontinua que también ha disminuido en un 14,15 por ciento y y los contratos formativos que han pasado de 167 en 2008 a sólo 77 (-53,89%) en abril de éste año. Aunque en comparación con marzo de éste año se note un ligero repunte en la contratación, con 5.184 contratos más (22,7%), ni la consellera de Treball i Formació, Joana Barceló ni los agentes sociales -patronales y sindicatos- han querido lanzar las campanas al viento hasta ver como evoluciona la contratación en plena temporada turística.

Fijos discontinuos

Una de las principales preocupaciones de los sindicatos mayoritarios de las Islas -UGT, CCOO y USO- es el retraso en la incorporación laboral que están sufriendo muchos trabajadores fijos discontinuos que trabajan en la restauración, la hostelería y la oferta complementaria balear.

Los secretarios generales de las tres formación sindicales Lorenzo Bravo (UGT), Katiana Vicens (CCOO) y David Díaz (USO) han dicho y reiterado a la consellera Barceló que hace falta la puesta en marcha de medidas concretas para garantizar que los trabajadores fijos discontinuos de las Islas podrán cobrar prestaciones sociales aunque trabajen menos meses de lo previsto.

El Govern se ha comprometido a estudiar, junto a los agentes sociales, medidas concretas para que el retraso en el inicio de la temporada turística no deje sin prestaciones a los trabajadores fijos discontinuos de las Islas.