Comparada con la diferencia de más de un millón de euros en la estimación del precio de la sede de la Cambra de Mallorca, la tasación de los bienes que el edificio alberga es 'peccata minuta', pero no deja de sorprender, e indignar, a los representantes camerales Pitiüsos que la estimación de valor presentada contenga algunos detalles que consideran sospechosos.

La tasación realizada por Taxo, filial de Tinsa, ofrece un valor de los bienes muebles de 113.000 euros, «una cifra sorprendentemente baja», según aseguraba la responsable de la Secretaría de la Cambra de Comerç d'Eivissa, Dolores Tur. La primera y principal sorpresa es que el documento no recoge una estatua cuyo valor ya superaría el del resto de elementos considerados.

«En el vestíbulo de la sede de Palma hay un relieve de bronce que recoge la entrada de Jaume I en Palma. La obra estaba alquilada y, en un pleno de 2005, se dijo que costaba mucho dinero al año y que era mejor comprarla», relata Tur. «El precio de la obra se estimó entonces en 120.000 euros. Los representantes de las Pitiüses nos opusimos porque, justo en esa reunión, se nos había rechazado una petición de mucho menos dinero para arreglar el edificio de Eivissa», añade. El olvido resulta tanto más destacable cuanto que el listado de bienes incluye posters o mesas cuyo valor no alcanza los 10 euros.

Desde las Pitiüses también resultan sospechosas algunas valoraciones de cuadros incluidas en el informe. «Destaca el hecho de que un retrato de un presidente de la Cambra pintado por Torrens-Lladó, un autor cotizado que ha retratado a los Reyes, se diga que no está firmado y se tase en 440 euros. En su momento costó 2,5 millones de pesetas (15.000 euro)», explica Tur. «En cambio, una vista de Dalt Vila no demasiado destacable, se tasa en más de 7.000 euros», añade la responsable cameral. Curiosamente, al ser esta una de las pocas referencias artísticas ligadas a las Pitiüses sería una de las que más fácilmente podría reclamar la Cambra de Eivissa si solicitara el reparto de estos elementos.

Otro de los datos que resultan curiosos para los responsables camerales de las Pitiüses es que la tasación recoge la valoración de centenares de libros y revistas que configuran la biblioteca de Mallorca. En total, el precio estimado supera los 8.000 euros, pero casi la mitad de los volúmenes están valorados en cero euros, incluidos algunos del siglo XVIII.