TORRES BLASCO

Una de cal y otra de arena: el vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Cooperación Territorial Manuel Chaves, dijo ayer que Balears se situará en la media de las comunidades autónomas cuando entre en vigor el nuevo sistema de financiación pero, a la vez, calificó de «difícil» y «delicado» el impulso del Régimen Especial Balear. Sin embargo fue bastante claro al destacar que el Régimen Especial Balears (REB) sería impulsado en la dirección que reclama Balears y el nuevo Estatut. Eso sí, una vez que se cierre el sistema de financiación.

Tras una reunión de hora y cuarto con el president Antich, no adelantó ninguna cifra concreta, respecto al nuevo modelo de financiación, aunque se comprometió a poner fin a la situación «injusta» que padece el archipiélago con el actual sistema, dado que sitúa a Baleares 21 puntos por debajo de la media de financiación per cápita.

Esta situación de «injusticia», según recordó, es debido a que el actual modelo, aprobado en 2001, no tiene en cuenta el factor de la población, lo que perjudica especialmente a Baleares, teniendo en cuenta que es uno de los territorios en los que más ha aumentado el número de residentes desde ese año, debido a la inmigración.

«El sistema actual no prevé un ajuste de la población, que tuviera en cuenta su incremento, lo que ha producido desajustes y déficit en la financiación de los servicios públicos destinados a los ciudadanos», criticó, al tiempo que señaló que el modelo aprobado en 2001 «propició una gran disparidad en la financiación per cápita entre las distintas Comunidades Autónomas, lo que ha provocado una gran desigualdad», dijo.

La reunión, celebrada en el Consolat de la Mar, fue un encuentro a dos, entre el president y el vicepresidente tercero. El delegado del Gobierno, Ramon Socías, participó en una parte de la misma. Tras la rueda de prensa, Antich y Chaves se fueron paseando hasta un bar próximo, junto al mar. El sol acompañaba y saludaron a varios paseantes.