La demora media para ser atendido por un especialista en los diferentes hospitales del Ib-Salut es de 31,8 días, mientras que para someterse a una prueba diagnóstica es de 30,65 días, según los datos facilitados por el Servei de Salut con fecha de 12 de abril.

Así lo reconoció ayer el conseller de Salut, Vicenç Thomàs, durante su comparecencia en la Comissió no Permanent de Salut, especificando que el número de consultas externas hospitalarias ha aumentado en un 6,5% durante el primer trimestre de este año hasta alcanzar las 322.560 consultas, frente a las 302.733 que se atendieron en los tres primeros meses de 2008. Según explicó el conseller, el número de personas que, con fecha de 12 de abril, esperaban ser recibidas por un especialista era de 26.194, mientras que 16.877 estaban en lista de espera para hacerse una prueba diagnóstica de radiología convencional, ecografía, TAC, mamografía o resonancia magnética.